Los partidos ARENA y FMLN sostuvieron negociaciones con grupos criminales para obtener su respaldo electoral durante la campaña presidencia de 2014, según confirmó hoy Paolo Lüers, un exguerrillero, columnista y miembro del consejo editorial de El Diario de Hoy, quien compareció ante la comisión de la Asamblea Legislativa que estudia la solicitud de desafuero en contra de Norman Quijano, diputado arenero en el Parlamento Centroamericano (PARLACEN).
En dicho periodo de elecciones, el candidato presidencial de ARENA era Quijano y el del FMLN Salvador Sánchez Cerén. Ambos han huido del país y están en Honduras y Nicaragua -respectivamente- luego del inicio de procesos de investigación en su contra.
Lüers explicó a los diputados de la comisión que tuvo conocimiento de las negociaciones en su calidad de mediador de la tregua entre pandillas, cargo que asumió a petición del exguerrillero y exdiputado efemelenista Raúl Mijango y varios líderes religiosos de la iglesia católica. Aclaró que este diálogo no era impulsado por el Gobierno del expresidente prófugo Mauricio Funes.
Según Lüers -quien para entonces ya era columnista de El Diario de Hoy- fue el pandillero Marvin Ramos Quintanilla, alias «Piwa», quien le contó en una reunión en la sede de una organización no gubernamental que «tenían pláticas con el FMLN y [que las] vamos a tener con ARENA».
Luego que Lüers declaró fue el turno para el segundo citado: el exdiputado de ARENA Ernesto Angulo.
El fundador del partido ARENA confirmó que el excandidato presidencial Norman Quijano ofreció financiar la rehabilitación y reinserción de los pandilleros con $100 millones del Presupuesto General del Estado.
El tercer citado era Miguel Ángel Simán, quien era el jefe de campaña de Quijano, pero notificó por escrito que no llegaría porque se encuentra fuera del país.