El Partido Acción Ciudadana (PAC) que llevó a la presidencia a Carlos Alvarado Quesada en 2018 sufrió el domingo su mayor derrota electoral en la historia, al quedar en la décima posición con su candidato al Ejecutivo Welmer Ramos González, con solo el 0.7 % de apoyo y sin ninguna representación en la Asamblea Legislativa, integrada por 57 diputados. El PAC solía contar con 10 diputados.
El país llevó a cabo sus comicios presidenciales y legislativos el 6 de febrero, con una ausencia de más del 40 % de sus votantes, pese a que el Gobierno permitió que los pacientes y personas positivas a la COVID-19 pudieran ejercer el voto «guardando las medidas de bioseguridad».
González, exministro de Economía durante 2014 -2017, no logró sobresalir entre los 25 candidatos a la presidencia, ya que el expresidente de centroizquierda José María Figueres y el exministro de Hacienda conservador Rodrigo Chaves, definirán en un balotaje el 3 de abril quién gobernará Costa Rica, una de las democracias más sólidas de América Latina pero en crisis económica.
Cuando el Tribunal Supremo de Elecciones ha contado el 88.2 % de los votos emitidos el domingo, Figueres, de 67 años, del Partido Liberación Nacional (PLN), lidera el escrutinio con 27.26 %, pero no le fue suficiente para ganar en primera vuelta. El economista de derecha Rodrigo Chaves, de 60 años, del Progreso Social Democrático, vino de atrás en las encuestas, y anotó un 16.7 %. Fue ministro de Hacienda del gobierno saliente por medio año.
Parece que este será el año del PLN, ya que también es el partido que más curules ganó dentro de la Asamblea. Su partido tendrá la representación de 18 parlamentarios. El partido Unidad Social Cristiana se adjudicó 11 curules y el partido Progreso Social Democrático estará representado con nueve diputados.