Con el fondo del verde imponente de los altos árboles del Parque de Aventuras Surf City Walter Thilo Deininger, la reconocida actriz española, Paz Vega, se detiene para conversar sobre su estadía en El Salvador grabando la película «Luciérnagas en el Mozote», que revive uno de los pasajes más cruentos de la guerra salvadoreña.
Paz se desplaza por el parque sin dudas. Lo conoce bien porque lo ha disfrutado y ha sido su set de grabación en varias escenas de la película en las últimas dos semanas.
Llegó al país el 5 de noviembre, aunque su decisión de ser una de las protagonistas de esta historia la tomó hace años cuando Ernesto Melara, director y escritor salvadoreño, le compartió el guion y ella quedó cautivada.
En su estancia, el clima de seguridad tanto como el potencial cinematográfico salvadoreño le han sabido a un agradable descubrimiento. Por eso, planea regresar de paseo con su familia y le augura una buena racha a la industria del séptimo arte salvadoreño.
Con sencillez y mucha honestidad, estas fueron las palabras de la ganadora del Goya a Mejor Actriz Revelación, en 2002, por su papel en «Lucía y el sexo».
¿Por qué eligió este papel?
Lo que me motivó es la historia en sí, no conocía este trágico evento de la historia de El Salvador y cuando leí el guion, un guion magníficamente escrito por Ernesto Melara, y, además, me reuní con él en Los Ángeles hace muchos años, pues la verdad que quedé fascinada con la historia, con la posibilidad de hacer ese proyecto. Me comprometí con él en que cuando se dieran las circunstancias para que el proyecto saliese que contase conmigo. Por eso estoy aquí.
¿Cómo se ha preparado para el papel?
Leyendo mucho sobre el conflicto salvadoreño, teniendo muchas conversaciones con Ernesto y, luego, hay una parte física que requiere el personaje, que es esa parte más de ser una guerrillera que me ha llevado una preparación más física de entrenamiento, de agarrar las armas.
Paz, han pasado muchos años desde que el guion llegó a sus manos, ¿hay algo en él, en el personaje que la cautivó y que la ha hecho estar a la espera de que se diera la oportunidad de rodar finalmente este proyecto?
Es que la propia historia, pensar que algo así pudo suceder en un momento y que esa historia no es mundialmente conocida, sino que realmente se queda en el país, creo que es importante que este tipo de acontecimientos trágicos se den a conocer, porque así uno evita en el futuro que vuelva a pasar. Y yo creo que las nuevas generaciones tienen que aprender de los errores del pasado. Y como dice Ernesto: “Aquí no hay vencedores ni vencidos”, en todas las guerras todos son perdedores, todo mundo pierde. Lo que pasa que en esto que describe la película hay un componente muy fuerte, muchas víctimas son niños, por ejemplo. Es impactante, y yo creo que es necesario honrar, de alguna manera, la memoria de las víctimas y, sobre todo, mostrarle a las nuevas generaciones que esto no puede volver a pasar.
A nivel personal, ¿cómo le impacta la historia? Tomando en cuenta que El Salvador, al igual que España, sigue sanando heridas de guerra que son como fantasmas que duelen, vuelven y nunca se van.
Es que es algo que yo creo que todos los países han vivido en un momento, España desde luego; pero todavía hay que luchar por saber quién y dónde están enterrados esos muertos. Son las exhumaciones, por supuesto. Creo que la memoria histórica es importantísima para sanar cualquier herida en una sociedad. La película es una manera de aliviar un poco, ¿no?, ese dolor que generan estos conflictos. Yo creo que los conflictos. Las guerras no deberían nunca suceder, menos entre hermanos, es un sinsentido. Y esta película es eso, una manera de demostrar y de, repito, que para mí es muy importante, enseñar a las nuevas generaciones que no puede volver a pasar.
Cuando se confirmó el proyecto y se habló de rodar en El Salvador, ¿cuál fue su expectativa sobre el país?
Pues no sabría decirte con qué expectativa vine. Es verdad que El Salvador todavía tiene una fama afuera que es un país peligroso, pero no solo este, muchos países en Centroamérica y Latinoamérica, pero en realidad es que ha sido todo lo contrario, ha sido hermoso, me he sentido comodísima, me he sentido segura. Todos los lugares donde hemos rodado han sido bellos. Bueno, aquí donde estamos rodando es un espectáculo este parque, que además nos ha dado la posibilidad de tener muchos escenarios en un solo lugar, todo. Las playas, he conocido un poquito de la costa, la gastronomía, es que me parece un país maravilloso.
Ha sido una sorpresa…
Sí, ha sido un descubrimiento hermoso y estoy segura que voy a volver con mi familia. Cuando tenía un ratito libre me he escapado y sí que he conocido algunas playas que me parecen preciosas, hermosas. Además, la posibilidad de hacer surf aquí.
¿Usted práctica surf?
Yo no, pero mi esposo sí y justo estamos ya planteando un viaje para que se disfrute de él y de los niños de las olas, que aquí además son continuas. Me parece un país maravilloso con muchísimas posibilidades y me alegra que haya ahora este proceso de resurgir y de darse a conocer como un país renovado.
Para El Salvador es super importante esto que está pasando, grabar una película a nivel de país, de industria. Esto es un antes y un después ¿cómo ha sido a nivel artístico la experiencia con el elenco, que en su mayoría son salvadoreños, incluyendo al personaje más chico, Mateo Honles?
Bueno, lo de Mateo es una barbaridad, es un niño que tiene un talento infinito, que tiene una inteligencia emocional apabullante y nos está dando una lección a todos. Y todos los muchachos que actúan como guerrilleros, la mayoría son salvadoreños y son maravillosos, están poniéndole todo el corazón y toda la pasión que el proyecto demanda. Hay muchísimo talento aquí, ya no solo en parte del castin, sino en la parte de técnica, los camarógrafos, todo. Hay un nivel increíble y creo que El Salvador se merece una industria potente a nivel cinematográfico porque tiene la gente y, luego, tiene un lugar maravilloso que cualquier sitio es perfecto para rodar, así que ojalá y la industria salvadoreña despunte y despegue después de este proyecto.
