Perú ultima este sábado los preparativos para el reñido balotaje del domingo entre Keiko Fujimori y Pedro Castillo, con la habilitación de 11.402 centros de votación tras culminar la distribución de 380 toneladas de material electoral en aviones, camiones y embarcaciones.
Los centros electorales, entre ellos cientos que servían de local de vacunación contra el covid-19, quedaron bajo vigilancia policial y militar, tras la llegada de las cajas con cédulas de votación, urnas, padrones y mascarillas para los ciudadanos que deben supervisar las mesas de sufragio.
En Tacabamba, el distrito de la región norteña de Cajamarca donde vive y vota Castillo, su familia intentaba hacer una vida normal este sábado, a pesar de la presencia de decenas de periodistas peruanos y extranjeros.
«Nos sentimos orgullosos que mi hermano haya llegado hasta esta altura siendo un hombre humilde», dijo a la AFP su hermana menor, Amelia Castillo, de 34 años, en el hogar del candidato en el cacerío de Chugur.
La esposa de Castillo, Liliana, ayudada por dos de sus tres hijos, cocinó gallina con maíz para el almuerzo mientras esperaba la llegada de su marido desde Lima, donde cerró su campaña el jueves.
En tanto, la hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori pasaba este sábado en familia en su hogar en la capital, según una fuente de su entorno. Por la tarde asistiría a una misa privada en una capilla cercana.
Keiko Fujimori también cerró su campaña el jueves en un mitin en Lima, donde en señal de reconciliación abrazó a su hermano menor Kenji, de quien se había distanciado por disputas políticas hace casi cuatro años.
«Sola no puedo llegar a la meta […], solo te pido que me des una oportunidad. Con tu apoyo este partido lo vamos a voltear», tuiteó Keiko en un esfuerzo para atraer los últimos votos.
Ninguno de los candidatos tiene previstas actividades públicas este sábado. En Perú rige una prohibición de toda actividad electoral desde el viernes y además hay ley seca hasta el lunes.
Un millón votan en el exterior
El material electoral fue distribuido en aviones y camiones a todo el territorio, pero en las remotas localidades de la selva amazónica y del lago Titicaca, que Perú comparte con Bolivia, fue transportado en embarcaciones de la Marina de Guerra.
«Estamos desplegando más de 380 toneladas de material electoral», dijo a la AFP el jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Piero Corvetto.
«Nosotros esperamos que no solamente en territorio nacional, sino que los peruanos en el extranjero, también acudan en un porcentaje superior a los que tuvimos en primera vuelta» del 11 de abril (70% del total), añadió.
Más de 25 millones de ciudadanos están convocados a las urnas en una nación donde el voto es obligatorio, tras una campaña marcada por la polarización y la exacerbación de los miedos, que llevó el precio del dólar al récord de 3,9 soles el viernes.
También votarán un millón de peruanos en 75 países, entre ellos 140.000 en Venezuela, Chile, Paraguay y Aruba que no pudieron sufragar en la primera vuelta debido a restricciones por la pandemia.
«Las condiciones de salubridad pública no nos permitieron hacer la elección» en esos países en la primera vuelta, explicó Corvetto.
Los primeros en sufragar serán los peruanos residentes en Nueva Zelanda y Australia, donde por la diferencia horaria la votación comienza este sábado a las 20H00 GMT, explicó a la AFP un responsable de la unidad de la ONPE encargada del voto en el exterior.
Keiko Fujimori, quien enfrenta su tercer balotaje, votará el domingo en el colegio Precursores del distrito limeño de Surco, mientras que Castillo lo hará en la escuela Salomón Díaz de Tacabamba en su natal Cajamarca.
Los primeros resultados oficiales se conocerán el domingo hacia las 23H00 locales (04H00 GMT del lunes).