El regreso de la tranquilidad en varias comunidades que estaban asediadas por la violencia ha comenzado a tener frutos tras el aumento de la operatividad de la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fuerza Armada.
La población coincide en que las medidas aprobadas por la Asamblea Legislativa e implementadas por el Ejecutivo han permitido controlar nuevamente varios territorios a escala nacional.
Además, hasta ayer se completaron 12 días del régimen de excepción. De estos, en cuatro no se reportó ningún asesinato, esto es una tercera parte del período.
En redes sociales, la etiqueta #PandillasNuncaMás se mantiene como una de las tendencias principales en El Salvador, lo que denota el apoyo definido para la estrategia del Gobierno.
Junto con la etiqueta, varios cibernautas publican historias sobre cómo la violencia de los grupos delictivos arrebató varias vidas y momentos entre familia.
Pese a las críticas de los opositores sobre las medidas, la seguridad de la población ha sido una prioridad.
En la calle, la ciudadanía destaca la pronta reacción del Ejecutivo en conjunto con la Asamblea Legislativa, ya que se emitieron de forma expedita las disposiciones ante la escalada de asesinatos entre el 25, el 26 y el 27 de marzo de este año.
Los efectivos de la fuerza Armada y los agentes de la PNC han ejecutado múltiples patrullajes e incursiones en zonas con alto índice delincuencial, y han capturado a integrantes de las pandillas.
En los operativos también se han incautado diferentes ilícitos que ocupaban los terroristas. Con las reformas de la ley, los delincuentes capturados pasarán hasta 45 años en prisión por ser parte activa de las pandillas.
También, las penas se agravan si hay cometimiento de otros delitos; y los jóvenes de entre 12 y 16 años ahora son juzgados con penas mayores.