En la quinta emisión de «Si el dinero hablara», un programa de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) en conjunto con «Diario El Salvador» que busca compartir historias alcanzables de éxito financiero, se entrevistó a Álvaro Guerrero, fundador de la empresa Hot Dog El Once.
La historia de este emprendimiento es una combinación del amor al fútbol, la buena comida y el negocio familiar.
De acuerdo a Guerrero, la inspiración del negocio fue la admiración hacia Jorge «El Mágico» González, el histórico jugador que llevó a la selección salvadoreña al mundial de 1982.
«Decidimos ponerle Hot Dog El Once, porque ese fue el número que “El Mágico” utilizó tanto en el Cádiz de España como en la selección de El Salvador. Quisimos hacerle un homenaje en vida», explicó.
El deseo de retratar la genialidad del histórico jugador y su ímpetu por salir adelante en los tiempos difíciles de la pandemia por Covid-19, le llevó a utilizar los ahorros que guardaba con su familia y así inició el partido más importante de su vida: el de emprender.
«La idea era generar un negocio sostenible, que nos permitiera en algún momento llevar el sustento a la familia. Empezamos con poco dinero, como $1,000, pero la idea era que con ese capital se tenía que diseñar un concepto, una marca y poder salir con la venta», comentó.

Tras iniciar el negocio, Guerrero se dio cuenta que sin una estrategia clara y sin planificación sería imposible llegar a la meta. Por ello, definió un plan de negocios, donde detalló los objetivos que quería perseguir con su emprendimiento.
Esa planificación y determinación fue el primer paso para alcanzar el éxito con Hot Dog El Once. Prueba de ello, es que luego de haber realizado la inversión, administraron sus utilidades en función de impulsar el crecimiento del negocio.
«Hasta el momento no hemos adquirido crédito. Desde que comenzó Hot Dog El Once empezamos con los ahorros, y las ganancias han sido reinvertidas […] Empezamos con un carrito de hot dogs en la calle y ahora ya tenemos un local que está condicionado a nuestro concepto», detalló.
Álvaro metió un golazo con su idea de negocio, inició desde cero y logró salir adelante. Ahora, su hot dog «Culebrita Macheteada» es el favorito de muchos salvadoreños.