En la sexta emisión de «Si el dinero hablara», un programa de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) en conjunto con «Diario El Salvador» que busca compartir historias alcanzables de éxito financiero, se entrevistó a Jaime Delgado, fundador de la empresa Hotel Papaya Lodge.
Surf, turismo y determinación fueron las palabras que más utilizó Delgado para describir la historia de su hotel, el cual está ubicado en Playa El Tunco.
Según el emprendedor, todo inició en los años 80, cuando su pasión por el mar le llevó a aprender a reparar tablas de surf, y ese oficio le permitió conocer una realidad que en aquel momento empezaba a construirse: los extranjeros aman las olas de El Salvador y buscan alojamiento para disfrutarlas.
«Me interesaba el tema de turismo, porque veía los turistas mochileros que llegaban a las playas y se quedaban una semana o más. Me llamó la atención ese rubro, porque había una forma de oportunidad para captar las divisas que ellos traían», narró.
Fue ahí cuando decidió subirse a la ola del turismo, y con unos ahorros que guardaba compró un espacio con una habitación. De acuerdo a Delgado, en ese momento no logró adquirir un crédito, pues la ausencia de récord crediticio le imposibilitó obtener fondos en la banca.
Sin embargo, el negocio fue creciendo y con el tiempo consiguió que las instituciones financieras le otorgaran un préstamo para ampliar a tres el número de habitaciones.
«El crédito fue la semilla que dio paso a todo lo que tenemos hoy en día, luego llegamos a 11 habitaciones y adquirimos más terreno. Ahora tenemos 17 habitaciones y tenemos 5 locales comerciales alrededor del hotel. Los créditos han servido mucho», indicó.
Para Jaime, la clave está en administrar bien el capital recibido y saber planificar cada proyecto con «los pies en la tierra».
«Si uno administra bien la plata, al final hay frutos. Lo que uno tiene que hacer es saber administrar, hacer sus proyectos, ver qué cantidad de plata se va a necesitar para levantarlos, cuál va a ser el período de espera para que estos proyectos empiecen a generar», apuntó.
Asimismo, mencionó que se debe saber esperar y evaluar los momentos del emprendimiento, pues la mayoría de proyectos se tardan entre 5 a 6 meses para que empiecen a generar ganancias.
«Uno tiene que dejar cierta cantidad de plata para que subsista la compañía, luego ya ella sola va caminando. Hay que estar seguro de lo que se quiere. También se tiene que hacer un presupuesto y ser dedicado», finalizó.
Ahora, su éxito le ha permitido edificar otro hotel en playa El Tunco, e iniciar negociaciones para construir dos hoteles más en oriente, uno en playa Las Flores y otro en playa Punta Mango.