Hace apenas unos años en El Salvador a diario se registraban muertes violentas de mujeres, asesinadas principalmente por sus esposos o personas cercanas, sin embargo, desde el 2019 se reportó una disminución y a la fecha, estos crímenes continúan reduciéndose drásticamente hasta en 70%, según las estadísticas fiscales.
De acuerdo a los datos de la Fiscalía General de la República, desde 2018 se ha procesado 188 casos por feminicidio agravado, en ese año hubo 87 víctimas; tras finalizar el 2019, cuando inició el actual gobierno, las estadísticas se redujeron en 50% [45 denuncias por este delito]; en el 2020 hubo solo 29 casos y para el año pasado la tendencia continúo a la baja con 27 feminicidios.
La mayoría de víctimas han sido mujeres de entre 18 a 30 años, según el ministerio público. Entre los casos mediáticos de feminicidio recientes está la muerte de Flor García, quien fue asesinada por su esposo, Joel Valle, en marzo del año pasado y enterró los restos de la víctima en un predio en el kilómetro 32 de la carretera Panamericana, en Cojutepeque, Cuscatlán.
García fue reportada como desaparecida después de haber salido de su casa en Cojutepeque, Cuscatlán, hacia San Salvador a comprar insumos médicos para la clínica, en la que ambos trabajaban. En ese momento, su pareja supuestamente «estaba durmiendo», pero en su declaración, Valle sostuvo que «la vio salir», y así se contradijo ante la Policía.
El trabajo arduo de las autoridades permitió que, a los 101 días de haber reportado la desaparición localizaran el cuerpo de la víctima.
Otro caso fue el de Rubia Verónica Henríquez Madrid, de 39 años. Su esposo, Manuel Antonio Berríos, alertó al 911 que «la habían secuestrado hombres armados». Sin embargo, se determinó que Henríquez Madrid fue asesinada el 5 de noviembre por su compañero de vida en el km 34 de la autopista hacia Comalapa.
En un primer momento, Berríos solicitó ayuda por el supuesto secuestro, dijo que había logrado escapar y salvaguardarse. De acuerdo con la información que brindó el esposo, la mujer fue atacada por los hombres al bajarse de un bus, quienes le dispararon y lanzaron su cuerpo en la canaleta. Sin embargo, ese mismo día, la Policía detuvo en flagrancia a Berríos, quien confesó que él asesinó a su compañera de vida.
Las cifras que registra la Policía Nacional Civil sobre feminicidios también coinciden con la reducción que registra el ministerio público.
Desde el 2019, las autoridades policiales reflejan una drástica disminución del 40% de feminicidios. En ese año, se reportaron 113 casos, seguido de 73 para el 2020 y para el año pasado, hasta el mes de noviembre, hubo 68 supuestos feminicidios. [Cabe destacar que la Policía registra toda muerte de mujer como feminicidio, sin embargo, son las investigaciones del ministerio público que determinan si lo son o no].
Todo feminicida es «quien causa la muerte a una mujer mediando motivos de odio o menosprecio por su condición de mujer», según el artículo 45 de Ley Especial Integral para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres. Este delito puede ser sancionado con una pena de 30 a 50 años de prisión.
APUESTAN POR CAPTURAR A CULPABLES
El actual gabinete de Seguridad le apuesta a ir tras los responsables de cometer todo tipo de delito, entre ellos, los causantes de feminicidios para que les «caiga el peso de la ley».
«Estamos dándole respuesta a todos los delitos de feminicidios, pedimos a la población que siga denunciando este y todo tipo de crímenes para poder capturar a los responsables», exhortó recientemente el ministro Gustavo Villatoro.
El director de la Policía, Mauricio Arriaza Chicas, también ha dicho que el trabajo articulado entre la Policía y Fiscalía ha permitido atender los casos de feminicidios, entre ellos el de Flor García, y darles un adecuado manejo.
Arriaza asegura que, en estos casos, como parte del Plan Control Territorial, «estamos dando atención a las familias (de las víctimas), para ver de qué manera se les puede acompañar, en qué se les puede ayudar».
El Salvador salió de la lista de los países más violentos del mundo desde 2020 gracias a los resultados obtenidos por el Plan Control Territorial, estrategia de seguridad implementada desde junio 2019 con el cual se ha logrado disminuir los homicidios, feminicidios, violaciones y otros delitos; caso contrario a lo que sucedió durante los 30 años de gobiernos de ARENA y el FMLN lo que condujo a hacer negocios de la seguridad.