Unas 50 personas fueron arrestadas en Akron la noche del lunes en medio de las manifestaciones en contra del asesinato del afroamericano Jayland Walker, de 25 años, quien murió luego de recibir 60 disparos de parte de ocho agentes después de una persecución por una ofensa vial.
La ciudad está enardecida por la muerte de Walker, quien estaba desarmado al momento de ser acribillado desde todas direcciones el pasado 27 de junio. En su automóvil se encontró un arma y la policía dijo que en algún momento de la persecución en auto Walker les disparó una vez.
El domingo por la noche manifestantes llegaron a los juzgados y comenzaron a lanzar botellas de agua y la policía respondió lanzando gases lacrimógenos. La familia de Walker pidió mantener las protestas de forma pacífica.
La cámara de cuerpo de los agentes mostró cómo los policías persiguen a bordo de patrullas a Walker y luego a pie cuando él trata de huir saliendo de su vehículo. Fue en ese momento que los oficiales abrieron fuego, disparando 90 balas de las cuales 60 impactaron en el cuerpo de Jayland.
«Hay tantas cosas que el sentido común deberían decirte sobre el entrenamiento policial. Estaba huyendo. Tenían su auto, podían atraparlo después», dijo el reverendo Ray Greene Jr., director ejecutivo de Freedom BLOC, una organización política, en declaraciones a Akron Beacon Journal. Los familiares pidieron que las manifestaciones se realicen de manera pacífica luego de que en la noche del lunes, quinto día, se perdiera el control. Varios establecimientos quedaron con los vidrios rotos.