Cada 5 de diciembre se celebra a escala internacional el Día Mundial de la Competencia, una fecha para resaltar el impacto que tiene la competencia empresarial en la economía y para reflexionar en la contribución que aporta a la eficiencia de los mercados y al aumento de ventajas y beneficios para los consumidores.
Sin embargo, surge también la pregunta: ¿es sano para una economía como la de El Salvador contar con un sistema de competencia? Hagamos un análisis al respecto con el siguiente ejemplo: A Juan Pérez le han recetado un medicamento específico para su enfermedad. Al salir a buscarlo, Juan verá cómo diferentes establecimientos le ofrecen precios variados por un medicamente con la misma función. Con esto, él podrá adquirir el que vaya mejor con su economía personal y familiar, algo que podrá determinar gracias al abanico de opciones que el sistema de competencia le presenta.
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A través de este ejemplo la conclusión es sencilla: la competencia en el mercado permite que las empresas mejoren su producción y, con ello, la calidad de sus productos, dándole a los clientes un sistema de opciones variadas para que encuentren la que más se ajusta a su presupuesto y que impacte de menor forma a sus bolsillos.
Esto no fuera posible sin una institución que se encargue de regular ese sistema de competencia y que verifique que se sigan las reglas que más beneficios traigan al cliente. En El Salvador, la institución que cumple esa función es la Superintendencia de Competencia (SC), la cual promueve el sistema de competencia y vigila que todos operen en igualdad de condiciones.
La SC también verifica el cumplimiento de la Ley de Competencia en El Salvador, por lo que también es el ente que se encarga de eliminar todas aquellas prácticas contrarias y prohibidas por dicha ley.
El impacto de la SC en la economía salvadoreña ha sido positivo, ya que proporciona las condiciones favorables para los clientes salvadoreños y los protege contra toda práctica contraria a la ley. Además, promueve y garantiza el ejercicio del sistema de competencias, lo que mejor la calidad de la economía y ayuda a la capacidad de ahorro familiar en El Salvador.
Son casi 15 años los que la SC ha estado vigilante de un sistema de competencias sano. En ese tiempo se destaca su labor en resoluciones emitidas para el sector de harinas, farmacéuticas, telecomunicaciones, gas licuado y las opiniones brindadas con el afán hacer prevalecer la competencia en los diferentes marcos normativos en cuyo alcance pueda ser incluida.