Al final de los años vividos en el futbol, puedo decir que fui un iluso soñando que un día iba a tener la satisfacción de ver un futbol diferente, mejor organizado, más profesional, con una infraestructura que permita jugar al nivel de la alta competencia, un entorno de desarrollo que beneficie la formación del jugador del futuro, un plan nacional que se ajuste a las exigencias del futbol de las grandes potencias del mundo, pues es con ellas que pretendemos competir.
Los largos años en el futbol me da la autoridad de opinar y ofrecer alternativas, buscando superar deficiencias crónicas que lleva a nuestro respetado deporte a batirnos en la arena movediza, sin poder salir del pantano.
“Nunca es tarde si la dicha es buena”, dice un popular refrán de la filosofía del pueblo: Debemos considerar que aún tenemos la oportunidad de corregir y enrumbar este popular deporte adonde tiene que estar ubicado con relación a tantas odiseas vividas en nuestra larga historia.
El liderazgo del dirigente juega el rol más importante en cualquier cambio que se pretenda hacer.
Los otros protagonistas
En el compendio de involucrados en la estructura del fúbol encontramos tres figuras que son claves para el crecimiento y desarrollo de nuestro futbol: El jugador, el entrenador y el árbitro.
Dichas personalidades son importantes en cualquier plan que se quiera implementar, lastimosamente siempre han estado en un segundo plano de una planificación, resulta penoso su exclusión al momento de tratar temas que competen solo a la gente de fútbol. En los países que apuntan a la alta competencia, estas figuras son dimensionadas como parte del espectáculo del buen juego.
El jugador
Es el actor principal o sea la razón de ser del fútbol, es por ello que su formación debe comenzar en temprana edad, inculcando valores, principios que dignifican al hombre y una formación deportiva que roce la excelencia; y para ello se requiere de un entorno que beneficie dicha formación en cuanto a factores elementales como la educación, nutrición, salud física, salud mental y la competición, entre otros.
Y todo acompañado de una metodología de entrenamiento capaz de crear un modelo de juego con relación a la idiosincrasia de nuestros jugadores. De esta manera, cuando nuestro joven jugador pase al futbol profesional le será de mayor facilidad mostrarse con éxito y como consecuencia, ser opción para nuestra selección nacional.
El entrenador
Es la figura determinante en la formación y desarrollo del jugador para la alta competencia.
Por eso se dice que detrás de un buen jugador, existe un entrenador capacitado y para ello el entrenador deberá cumplir requisitos que lo avalen el haber practicado el fútbol, y como jugador haber vivido las exigencias del juego.
Además, deberá apostar a su preparación académica, para adquirir conocimientos científicos que le ayudarán a poder entender el desarrollo físico, la importancia del entrenamiento de la concentración y la toma de decisiones en el juego, y también entender la importancia de la adquisición de una técnica individual y conocimientos tácticos del juego en el jugador.
El árbitro
Es la persona encargada de que se cumplan las reglas del juego durante un partido, las cuales han sido establecidas por la Federación Internacional de Fútbol (FIFA). Además, debe velar por el juego limpio (Fair Play), cuidar del espectáculo en el nivel profesional, y en el nivel formativo tener el conocimiento de aplicar un arbitraje educativo que beneficia al jugador en formación, aparte de darles conocer las 17 reglas de juego.
En la alta competencia el árbitro ocupa un lugar preponderante porque desde su buena participación se garantiza el buen espectáculo, los conocimientos de este respetado personaje se deben aprovechar en el desarrollo de nuestro futbol.
La infraestructura
Pilar fundamental en el desarrollo del futbol en un país y además implica un significativo incremento del patrimonio de una federación o club y es un indicativo que determina el progreso.
El Salvador es un país afiliado a FIFA desde 1938 y en CONCACAF desde 1961, hemos ganado el derecho de competir en dos copas del mundo de FIFA en selección absoluta y en una ocasión en el nivel U-20.
Lastimosamente estos logros no han sido suficientes para entender que nuestro fútbol necesita de todas las fuerzas vivas trabajando en equipo, en base a un plan nacional desde el fútbol base, culminando al fútbol de élite (Selección nacional), superando las deficiencias que han evitado un mayor crecimiento en el área.
El talento existe, la pasión en nuestros niños, jóvenes se manifiesta en sus rostros ávidos de conseguir sus sueños.
En ningún país del mundo el futbol tiene futuro. El futuro se construye en su juventud.
En ningún país del mundo el futbol tiene futuro. El futuro se construye en su juventud.
PROYECTO AZUL
El liderazgo del dirigente juega el rol más importante en cualquier cambio que se pretenda hacer, es donde nace la visión de cómo queremos ver al fútbol en el futuro, y para ello será necesario sincerarse, y medir cuánto es el compromiso que tiene el dirigente en cuanto afrontar los problemas y cómo superarlos, buscando alianzas con diferentes instituciones, potenciar los clubes y las ligas.
Ligas competitivas tiene que ser una apuesta al cambio. Fui parte de los invitados al seminario que la Fundación Educando un Salvadoreño (FESA) organizó, haciendo participe a las diferentes fuerzas vivas del fútbol con el fin de elaborar un proyecto para el fútbol, y así nació el “Proyecto Azul”.
Me atrevo a decir que ha sido el último intento de buscar un plan para nuestro fútbol y que poco a poco perdió la atención de la dirigencia.
ENTRENADOR DE FORMACIÓN
Se debe apostar a un fútbol jugado con intensidad, precisión y velocidad. Y para ello se necesitan entrenadores competitivos, competitivos consigo mismo en el deseo inmenso de estar actualizado en las tendencias del entrenamiento, estar consciente del rol que representa en la búsqueda del cambio.
Por todo lo expuesto tenemos que identificar las características del entrenador y poderlos identificar como entrenador de formación y entrenador para el futbol profesional.
Los dos son importantes y necesarios en un club organizado y deberán complementarse en un trabajo articulado, buscando objetivos trazados en la planificación.
FICHA TÉCNICA
NOMBRE: Óscar Emigdio Benítez
NACIONALIDAD: Salvadoreña (Santa Clara, San Vicente, 6 de octubre de 1945)
EDAD: 75 años
EXPERIENCIA: El profesor Óscar Benítez entró a su amplio recorrido en el mundo de los banquillos como asistente del maestro Conrado Miranda, con Águila 1983 y de ahí en adelante ha desfilado por más de una docena de equipos que incluyen incluso refil. Así ha dirigido directamente al Águila, FAS, Alianza, Firpo, Municipal Limeño, Atlético Marte, y equipos que ya desaparecieron como Once Municipal, Balboa o San Salvador. En segunda estuvo con Coca Cola, el Platense y Aspirante. Internacionalmente prestó sus servicios al Real España y al Motagua de Honduras. También ha dirigido desde la Sub17 de El Salvador hasta la absoluta. En cargo administrativo fue hasta el año anterior Director Deportivo de Águila, fue presidente de la Asociación de Entrenadores de Fútbol de El Salvador (AEFES). Es instructor de Concacaf y pertenece al Grupo de Análisis Técnico de esta institución regional.