Samuel García tiene 36 años y los últimos 12 ha sido comerciante en el Centro Histórico de San Salvador. Tuvo un puesto dentro del Mercado Ex-cuartel, luego se pasó a un local de un pequeño centro comercial y desde octubre pasado decidió emprender otro negocio: «Ramé. Chaotic but beatiful» («Ramé. Caótico pero hermoso»).
Su fuerte siempre ha sido la oferta de productos para el hogar, ropa, calzado, carteras, cinchos, como dicen en el caló comercial: se ha dedicado a la venta de misceláneos.
Ahora, innova con una cafetería en la intersección de la 3.a calle poniente y 2.a avenida sur, local 147-E, a solo 100 metros de la histórica Plaza Morazán.
Ramé se suma a la oferta gastronómica del Centro Histórico y espera convertirse en punto de encuentro para los capitalinos y para todos los que visitan San Salvador.
Ambiente familiar
Samuel, su hermana Deisy, la prima Sonia, el sobrino Kevin y la amiga Aracely son los responsables de atender a los clientes.
Así como una familia está detrás del negocio, el ambiente de Ramé posee esa característica: es puro ambiente familiar, en un espacio muy acogedor.
Samuel invirtió en la remodelación del establecimiento y ha logrado darle nuevo rostro a una parte del viejo edificio capitalino donde se ubica la cafetería.
Apenas se ingresa al negocio están las mesitas y sillas para los clientes. Al fondo está una gran barra (a manera de desayunador con sillas altas) y tras ella se ubica la cocina. Un rótulo neón, arriba y a la izquierda de la barra expresa: «Ramé. Chaotic but beatiful».
«El nombre lo saqué de internet. Estaba buscando un nombre para la cafetería y esa palabra tiene mucho significado. Ramé es una palabra balinesa (de Bali, isla de Indonesia), se refiere a que algo es hermoso, pero caótico a la vez», indica Samuel.
El emprendedor enlaza esa palabra con sueños, coraje, valentía, decisión, así como actuó él hasta lograr su emprendimiento, que solo fue posible tras vender su casa.
El menú
El lugar ofrece variados platillos: hay combo de hamburguesa y papas fritas, a $4.50; sándwich de jamón de pavo y soda, a $2,75, y si le agrega papas fritas el costo es de $4. El combo de hot dog, papas fritas y soda vale $4, mientras que los nachos con chili y soda cuestan $3.
Hay crepas saladas y dulces. Entre las primeras está la de jamón y queso. En cuanto a crepas dulces, una de las especialidades es la de banano, acompañada de sorbete y bañada con chocolate y azúcar glas ($4.50). Aunque también puedes pedir la de fresas con crema, siempre con sorbete, chocolate y azúcar glas. La de mantequilla de maní también es una buena opción.
Hay smoothie de mango, sunday mix, cocoa con marshmello, frozen (de chocolate, vainilla, fresa y galleta), sorbetes de chorro (chocolate, vainilla o combinados), café de la casa, capuchino moca, café expreso, batidos de fresa, pinchos de fruta (sandía, banano y fresa), sodas.
Por las tardes las delicias típicas están a la orden: hay empanadas, leche poleada, canoas, ayote en miel y enchiladas.
Todas estas delicias las puede encontrar de lunes a viernes, de 8 de la mañana a 6 de la tarde. Los sábados de 8 a. m. a 4 p. m. Busca en Facebook Ramé Snacks y en Tik Tok Ramé. Para pedidos puedes llamar al 2281-3290 y 2279-6786. También puedes escribir al 6066-9504 y 7151-7948.
