Las elecciones legislativas y municipales de 2021, le dieron una gran lección a los partidos políticos que corrieron por un curul y por una de las 262 sillas edilicias que se disputaron el 28F. Los salvadoreños acudieron a los centros de votación llenos de esperanza de un El Salvador más próspero, así lo explicó Ramón Villalta, director ejecutivo de la Iniciativa Social para la Democracia (ISD), a Diario El Salvador.
La lectura preliminar sobre los resultados de dichas elecciones donde destacó que ‘la gente votó por un cambio y por candidatos que tengan una mejor opción, con mejores propuestas y libres de corrupción, es el mensaje contundente para los políticos actuales.
«El resultado de la elección corresponde con los resultados que las diferentes encuestas venían señalando, criticados por los partidos FMLN y Arena, en términos de las preferencias electorales».
Ramón Villalta
Asimismo, en términos de las preferencias electorales el especialista en política añadió que ARENA había sido el partido que había mantenido a diferencia del FMLN hasta el 2019, «un voto duro bastante consolidado que rondaba los 850,000 y 900,000 votantes».
Una cantidad de votantes histórica que habían mantenido por casi una década desde 2012, 2015, 2018 e incluso 2019.
«La cuestión era si ese voto se iba a seguir manteniendo fiel o iba a ocurrirle lo mismo que ya le había ocurrido al FMLN en 2018 y a ARENA en 2019 y le paso lo mismo. Hay una evidente movilidad del votante de ARENA hacía otros partidos», según Villalta.
En el análisis, Villalta asegura que el movimiento de votantes se dio para otros partidos, como «Nuestro Tiempo, Nuevas Ideas y hasta una expresión que movilizó el voto a otros partidos».
El experto en política aseguró que el voto consolidado que tenía ARENA se fraccionó y sus votantes que se movilizaron por razones en las que también se ha visto inmiscuido el FMLN, la corrupción.
«La gente se ha venido expresando con respecto al desempeño que ha quedado en evidencia por las prácticas de corrupción y por buscar el beneficio para pequeños grupos y que ha generado un distanciamiento con su mismo electorado», detalló el máximo representante de ISD.
Esto ha permitido que el votante apoye una alternativa que no había contemplado en años y que ahora en estas elecciones de 2021 se convirtió en una opción diferente.
El FMLN entra en una situación más complicada porque ha perdido la credibilidad más que ARENA. «Al FMLN le está pasando lo mismo que le pasó al PDC», dijo Villalta.
El voto duro del FMLN desde 2009 era de 850 mil votantes, pero en 2018 bajo a la mitad aproximadamente y esto corresponde a que a los partidos de izquierda les cuesta más recomponerse que a los partidos de derecha, afirmó el representante del ISD.
Mientras que el caso de ARENA es que la fuga de sus votantes ha sido gradual, pero si no se recompone en estos próximos dos años para las próximas elecciones podría bajar más su número de electores.
«El cuadro político que se le está presentando a ARENA es el mismo que se le presentó al FMLN en 2018. En estas elecciones se proyecta que ha tenido su primera disminución sustantiva cerca de 400 mil votantes, perdiendo un caudal de votos significativo», acotó Villalta.