Los privados de libertad en fase de confianza se encuentran apoyando trabajos de mejora en la infraestructura educativa de diferentes centros escolares en el país. El Instituto Nacional Albert Camus es uno de los beneficiados, pues ahí un grupo de reos realiza trabajos de pintura, fontanería y electricidad. También apoyan con limpieza de canales y poda de ramas.
Dicho apoyo es considerado como un beneficio para la comunidad educativa, ya que la institución percibe un importante ahorro y también es una estrategia para reinsertar a los privados de libertad, enseñándoles habilidades para la vida.
«El apoyo que nos realizan es muy valioso porque eso nos ayuda a mejorar el centro educativo. Es una decisión acertada del gobierno de disponer personal para que colabore en la infraestructura de salud y educación. También es una oportunidad de que ellos se integren a la sociedad, porque este tipo de trabajos se necesita todo el tiempo. Es positivo y excelente este tipo de actividades. Estamos muy agradecidos con Centros Penales y con el gobierno central», dijo Elba Maribel Torres de Figueroa, directora del Instituto Albert Camus.
Unos 300 centros educativos serán intervenidos con trabajos de mejora, y las labores se incrementarán en la época lluviosa debido a los riesgos. «Esperamos tener una intervención de 300 centros educativos con apoyo de la Dirección General de Centros Penales, 62 de los cuales ya fueron intervenidos», dijo Carla Hananía, ministra de Educación.
La mejora de la infraestructura escolar tiene un impacto positivo en el aprendizaje de los estudiantes, indicó Torres. También explicó que en dicho Instituto ha incrementado la matrícula para 2021, lo cual podría estar relacionado con el constante mantenimiento que se le ha brindado a la institución, ya que, durante la pandemia, los maestros también realizaron algunos trabajos de limpieza. «Como aumentó la matrícula este año, habilitamos tres secciones más. El hecho de ver el instituto bonito sirve de motivación para los estudiantes y padres de familia», destacó la directora. Actualmente, más de 1,000 reos salen todos los días para apoyar la entrega de alimentos, reparar unidades de salud y puestos policiales.