En lugar de animar a los votantes previo a las elecciones de medio término de noviembre como pretende, el discurso de «división» que pronunció el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en Filadelfia contra el Partido Republicano y, en concreto, contra su oponente Donald Trump provocó rechazo y avivó las críticas en su contra por no resolver el problema de la inflación, el aumento de crímenes violentos y el terrorismo doméstico.
Los republicanos alzaron su voz en redes sociales luego de que el demócrata los tachara como una comunidad que «representa un extremismo y que amenaza los cimientos mismos de nuestra República». Luego de decir que sus oponentes políticos son una «amenaza para la democracia», varios salieron a recordarle al presidente que estaba hablando de «la mitad de los estadounidenses».
«La retórica llena de odio y amenazante de Joe Biden esta noche fue vergonzosa. Su comportamiento es cada vez más errático. Y sus amenazas contra medio país -sus conciudadanos- son peligrosas», declaró el senador por Missouri, Josh Hawley.
«La inflación sigue aplastando a las familias trabajadoras. El Congreso debe centrarse en soluciones reales», compartió en su cuenta de Twitter el senador Bill Cassidy, de Louisiana.
«La inflación liderada por los demócratas ha hecho retroceder a las familias estadounidenses con cada nueva factura de comestibles. La economía de Biden no es algo de lo que presumir», publicó la senadora de Tennessee, Marsha Blackburn.
El senador de Carolina del Sur, Lindsey Graham, argumentó que las políticas de Biden son las que están generando los problemas económicos y sociales en Estados Unidos.
«Con el debido respeto, señor presidente, no hay nada malo en el alma de Estados Unidos. El pueblo estadounidense está sufriendo a causa de sus políticas: Inflación desenfrenada, crimen fuera de control, el terrorismo en aumento y fronteras rotas. Deje de sermonear y cambie sus políticas antes de que sea demasiado tarde», se dirigió al mandatario.
ATAQUE A LOS REPUBLICANOS ES ATAQUE A «LA MITAD DEL PAÍS»
En junio, un análisis de los registros de la afiliación partidaria realizado por la agencia de noticias Associated Press reveló que más de un millón de votantes de 43 estados se pasaron al Partido Republicano en el último año y que la mayoría se encuentra en los suburbios. Según el informe, se trata de votantes universitarios que se alejaron del Partido Republicano durante la era de Donald Trump, pero que están regresando al partido al ver la administración de Biden.
Los votantes que más están retornando al partido residen en Denver, Colorado; Atlanta, Georgia; Pittsburgh, Pensilvania y Cleveland, Ohio. Mientras el partido avanza con más simpatizantes en Harrisburg, Pensilvania; Raleigh, Carolina del Norte; Augusta, Georgia y Des Moines, Iowa.
«Biden está usando técnicas fascistas y atacando a sus propios ciudadanos. Está trastornado y delirante… Esto da miedo», compartió el usuario en Twitter Norse_t.
«La inflación de Biden me está haciendo sufrir a la hora de comprar las cosas básicas que necesito para mí y mi familia. Incluso en el punto álgido de la pandemia, nunca fue así con Donald Trump. #Trump2024ParaSalvarAmérica», señaló el usuario Arturo Zaher.
La sorpresiva nueva retórica de Biden fue la segunda parte de las palabras de su secretaria de prensa Karine Jean-Pierre, quien un día antes declaró que los republicanos son «una amenaza extrema para nuestra democracia, para nuestra libertad, para nuestros derechos». «Si no estás con la mayoría de los estadounidenses, eso es extremo, esa es una forma extrema de pensar», manifestó.
Biden navegó la campaña presidencial contra Trump abanderado con la promesa de unificar a Estados Unidos. De ahí que esta nueva retórica de polarizar al país haya provocado tanto rechazo y conmoción.