En Guatemala, la Subdirección General de Análisis de Información Antinarcótica (SGAI) capturó junto a la Policía Internacional (Interpol), al salvadoreño Daniel Alejandro Guzmán Rodríguez, quien en ese país había adquirido documentos con el nombre Alfredo Mendoza Ramos, de 52 años, quien tiene difusión roja para ser extraditado por tráfico ilícito de drogas.
Lo capturaron en el kilómetro 29 y medio de San Lucas Sacatepéquez, en un trabajo con las autoridades guatemaltecas y la Policía Nacional Civil de El Salvador.
«En El Salvador tiene antecedentes por homicidio agravado y es investigado por formar una red de narcotraficantes que se dedican a la elaboración, traslado y venta de droga cristal (metanfetamina)», publicó la Policía de Guatemala.
El ministro de Gobernación del vecino país, Francisco Jiménez, destacó la detención realizada y le expresó al ministro de Justicia y Seguridad Gustavo Villatoro que son «grandes resultados para nuestros países».
Ante esa publicación, el titular de Seguridad de El Salvador le respondió a Jiménez diciéndole que «no importa cómo se disfracen o escondan, tenemos los recursos para encontrarlos y hacer que paguen por el daño causado a nuestras sociedades».
En las investigaciones realizadas por las autoridades salvadoreñas, Guzmán Rodríguez, es uno de los principales proveedores de droga de las pandillas y además se dedicaba a elaborar drogas sintéticas.
Gustavo Villatoro, informó que el presunto narcotraficante se había radicado en Guatemala y para no ser identificado y localizado se había cambiado de nombre.
En esa nación se hacía pasar como repartidor de gas, pero las indagaciones han determinado que su actividad tiene que ver con la venta, distribución y fabricación de drogas como metanfetamina.