Históricamente los salvadoreños radicados en el exterior incrementan el monto de sus envíos de remesas al final del año, con la intención de contribuir, entre otras necesidades, con los gastos de las fiestas y los regalos y esta tendencia se vio materializada en diciembre de 2022.
Según los indicadores del Banco Central de Reserva (BCR), durante el último mes del año pasado, los envíos de dinero desde el exterior sumaron $760.3 millones, cifra que superó por $10.2 millones a lo que los connacionales radicados fuera del país enviaron en concepto de remesas en diciembre de 2021.
El acumulado entre enero y diciembre de 2022, ascendió a $7,742 millones, cantidad que supone un crecimiento del 3.2 % con respecto a la cifra reportada al cierre de 2021 cuando el país recibió $7,517.1 millones en concepto de remesas, es decir $224.9 millones, según datos publicados por la entidad financiera estatal.
A mediados de diciembre de 2022, el presidente del BCR, Douglas Rodríguez, informó que la proyección de entradas de remesas para el cierre del año era de $7,500 millones, es decir que la meta fue superada por $242 millones.
En aquel momento, el funcionario también afirmó que «las remesas familiares son además una puerta de entrada para la inclusión financiera para los salvadoreños en cualquier parte del mundo», reafirmó.
Según el BCR, cerca de 2.5 millones de salvadoreños viven en el exterior, quienes migraron debido a la poca seguridad pública y la falta de condiciones económicas y oportunidades que gobiernos anteriores no les brindaron, situación que ahora se ve mejorada desde la llegada al poder del presidente Nayib Bukele.
El funcionario también dijo que las remesas son un soporte económico muy importante para alrededor del 31 % de los hogares salvadoreños, que reciben en promedio $311.5 mensuales, y constituyen un flujo para la estabilidad de El Salvador, y que, en promedio, representan un 25 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país.