Regresan los elotes locos, los dulces típicos, las ruedas y las fiestas de agosto a la capital. En el estacionamiento del estadio Cuscatlán todo está listo para arrancar con la gran celebración en el marco de las fiestas patronales de San Salvador en honor del Divino Salvador del Mundo.
«Todos los capitalinos estamos esperando con ansias este momento después de dos años en los que, debido a la pandemia de la COVID-19, no hemos podido tener nuestras fiestas patronales como nos las merecemos», expresó Manuel Rodríguez, director de Desarrollo Municipal de la alcaldía de San Salvador.
Pasado el confinamiento y el distanciamiento social por el coronavirus, el alcalde Mario Durán ha organizado el parque de diversiones más esperado por los ciudadanos, Sívarland, con alta garantía de seguridad, orden, aseo y alegría para los visitantes.
«Hemos preparado un montón de diversiones para todos los gustos con un concepto familiar. Vamos a tener todos los días diferentes conciertos, habrá música para que bailemos, en las tardes habrá espectáculos de fantasía para los niños; de igual manera, estarán los tradicionales juegos mecánicos para todos los que les gusta la adrenalina», aseguró Rodríguez.
Son más de 40 juegos mecánicos, incluyendo los del popular Play Land Park y los nacionales, que estarán funcionando en el parque de diversiones, indicó Irvin Rodríguez, encargado del comercio público de la comuna capitalina.
«Son para niños, jóvenes y adultos. Incluso para los niños tenemos ruedas pequeñitas para que los padres se sientan seguros, cómodos y en un espacio controlado para sus hijos mientras disfrutan», dijo.
Por supuesto, las ventas no se quedarán atrás. Son más de 300 comerciantes los que ofrecerán sus productos en la feria.
«Hay una enorme expectativa de parte de los comerciantes. Son vendedores de diferentes giros, entre comedores, restaurantes, tiro al blanco, artesanías, golosinas y dulces tradicionales», detalló Irvin Rodríguez.
A partir de mañana desde las 2 de la tarde, Sívarland abrirá sus puertas a todos los salvadoreños que deseen divertirse y degustar los bocadillos típicos de la época en San Salvador, con la mayor tranquilidad que ofrecerá el amplio dispositivo de seguridad en la zona.
«Hemos instalado más de 70 cámaras de seguridad que estarán siendo monitoreadas con un complejo instalado en Sívarland. De igual manera, vamos a contar con el apoyo del Gobierno Central por medio de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ejército. Tenemos más de 1,000 elementos y a ellos se suma nuestro Cuerpo de Agentes Metropolitanos (CAM) que va a apoyar para tener un ambiente seguro», afirmó el director de Desarrollo Municipal.
La alcaldía de San Salvador ha habilitado el sitio web sivarland.net para que los salvadoreños conozcan la programación de las actividades que se desarrollarán del 1.º al 7 de agosto.
El desorden y la inseguridad se quedaron atrás
Habrá una gran diferencia entre las fiestas agostinas de San Salvador de este año y las que se celebraron de 2006 a 2015, aseguró Edgardo Mulato, diputado de Nuevas Ideas.
«Estamos viviendo una época distinta. Antes los funcionarios utilizaban estas fechas para hacer política barata. Ahora nuestra única intención es poner en el centro a los salvadoreños y darles tranquilidad durante los festejos», dijo el legislador.
Desde 2006 hasta 2009, la comuna capitalina fue liderada por la efemelenista Violeta Menjívar, quien ahora guarda arresto domiciliar por el delito de malversación de fondos.
Mientras que de 2009 a 2015 fue el arenero Norman Quijano quien condujo la municipalidad por dos períodos consecutivos, en los que la situación de inseguridad durante las fiestas agostinas se agudizó.
«El tema de seguridad es la parte en la que más vamos a notar cómo se vivirán ahora las fiestas agostinas y cómo fueron antes. En 2010 la cantidad de homicidios en la semana de fiestas agostinas osciló cerca de las 100 muertes», explicó Mulato.
Fue hasta la llegada de Nayib Bukele como alcalde de la capital cuando se implementó la solución para garantizar mejores festividades agostinas para los salvadoreños, se trasladó la feria del predio Don Rúa hacia un lugar que reunía las condiciones idóneas.
