Los precios saltaron al 7% en Estados Unidos en 2021, la tasa más alta desde hace 40 años. Por lo que la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, se refirió con preocupación ante el porcentaje alto por el tema de la inflación.
«Hacemos todo lo que podemos por resolver los problemas de la cadena de aprovisionamiento que han hecho subir los precios», subrayó Yellen agregando que en este caso «la Reserva Federal (banco central) juega un rol importante».
Yellen reconoció que el nivel y la persistencia de la inflación habían sido muy superiores a lo previsto. «Hemos sido golpeados por la pandemia que ha generado desafíos económicos que nadie había anticipado», explicó.
«La inflación aumentó más que lo que se esperaban la mayor parte de los economistas, incluyéndome, y por supuesto, es nuestra responsabilidad, junto con la Fed el remediarlo, y lo haremos», aseguró.
La oposición republicana acusa especialmente a la política fiscal de Joe Biden de ser una política inflacionaria, a través de planes de estímulos de la economía demasiado generosos. Pero para Janet Yellen, esos gastos han evitado a la primera economía del mundo su hundimiento y han permitido limitar las inequidades.
También invitó a revisar «todas las cosas malas (…) que hubieran podido producirse sin las intervenciones que hicimos con el plan de relanzamiento de la economía estadounidense», como por ejemplo «una tasa de paro elevada» y permanente o el aumento de la «pobreza en los niños».
«Estábamos muy preocupados (de que esto) ocurriera», comentó.