El Salvador cerró 2024 con la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes más baja de Latinoamérica. Con 1.9 homicidios por cada 100,000 habitantes, El Salvador tiene la mitad de la tasa de Argentina, el país en el segundo lugar (3.8).
Si bien el trabajo hecho por Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad del Gobierno de Javier Milei, ha sido sorprendente, porque logró reducir drásticamente la inseguridad en Argentina, palidece ante los logros obtenidos por el presidente Nayib Bukele y su políticas de seguridad, que desarticularon a las pandillas.
Ecuador tiene la situación más complicada del continente, con una tasa de 38.4 homicidios por 100,000 habitantes. Incluso es más inseguro que México, que tiene una tasa de 25 y un enorme problema con la violencia del narco.
El Salvador es un oasis de seguridad en Centroamérica. En Panamá, que lleva el segundo lugar, la tasa de homicidios es de 13 por cada 100,000 habitantes. Guatemala tiene 16.1, y Costa Rica, 16.6. Honduras está al tope de inseguridad, con 26.8 muertes violentas por cada 100,000 habitantes.
Lo interesante del caso de Argentina es que la de 2024 es la tasa más baja en 25 años. Además, se destaca del resto de los países suramericanos. De hecho, se alejó del tercer lugar, Perú, que cerró el año con una tasa de 5.4. La ministra Bullrich visitó El Salvador en julio del año pasado para conocer la estrategia de seguridad implementada por el Gobierno del presidente Bukele, que había ganado notoriedad por su efectividad.
El Salvador sigue siendo un ejemplo de cómo un Estado puede retomar el control de su territorio aplicando las leyes de manera justa y equitativa, pero también con mucho valor y decisión.
Gracias al nuevo espíritu tanto en la Policía Nacional Civil como en las Fuerzas Armadas, el país también puede colaborar a mejorar la seguridad de la comunidad internacional. Este fin de semana, el presidente Bukele informó que la Marina Nacional había hecho cuatro incautaciones en altamar en una sola misión: 4.3 toneladas de cocaína incautadas valoradas en más de $100 millones. De este modo, El Salvador logró que esa enorme cantidad de droga no llegue a sus mercados, donde afecta a la juventud y a la sociedad misma.
«Felicitaciones a la Fuerza Armada de El Salvador por este primer importante golpe al narcotráfico del año. Este esfuerzo refuerza la seguridad de El Salvador y contribuye a un futuro más seguro para la región y nuestros países», reconoció la Embajada de Estados Unidos en sus redes sociales.