Yamileth Torres, de 30 años, tiene aproximadamente ocho meses de conducir sin licencia, mientras que Carlos Vásquez, de 45 años, ya lleva cinco años manejando sin documentos de tránsito. La poca flexibilidad de instituciones para realizar los procesos, falta de tiempo y dinero, o simple dejadez, son algunas de las excusas de ambos salvadoreños para andar manejando sin estar autorizados para ello.
Torres y Vásquez son parte de los 43,090 salvadoreños que conducen vehículos sin estar autorizados, según las estadísticas de la División de Tránsito Terrestre de la Policía Nacional Civil (PNC). A la cifra se suman 26,667 motociclistas y 2,156 conductores del transporte público que tampoco están acreditados.
«Durante este tiempo nunca he sacado licencia a pesar de la insistencia y el riesgo que corro, pero no la he sacado por varias razones, sí he sido descuidado, pero también es por falta de tiempo, mi trabajo me absorbe y no he podido ir a tramitarla», contó Vásquez.
Vásquez intentó hacer el trámite hace dos años, hizo el examen psicológico, pero no continuó con la siguiente prueba teórica y el tiempo se venció. En el caso de Torres, fue víctima de la paralización por la cuarentena decretada por la COVID-19.
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«Estaba en clases de manejo y el día que terminé fue que se suspendieron los trámites y desde entonces estoy esperando. Ahora, por el tiempo del trabajo se me ha complicado y hacer tanto trámite decepciona y estresa, aunque sé que debo hacerlo», dijo Torres.
Para el jefe de la División de Tránsito de la PNC, Óscar Nuila, manejar sin tener todos los documentos en regla es un problema atentatorio. «Esto es un claro peligro al volante», opinó.
Sumado a las personas que no deben conducir, porque aún no han sido autorizados, están los conductores que no portan licencia, que son 21,745 y 11,055 motociclistas. Además, de 2,968 personas andan con licencia caducada.
Sin ninguna amenaza
Cuatro de cada 10 salvadoreños manejan sin tener todos los documentos en regla, según la Policía. Para las autoridades, el que esta cifra no disminuya se debe a que el castigo que reciben los infractores es muy leve.
«Hay factores importantes por los que la gente no anda su licencia. Antes nosotros le quitábamos el vehículo por andar sin licencia, hoy no está en las causales. Esto es bien atentatorio porque tendríamos que tener esa herramienta coercitiva para obligar a la gente que ande su licencia», aseguró Nuila.
Para el jefe policial, otro factor que influye es que las multas son muy bajas, ya que por esta sanción sólo se impone una infracción por $57.14. Este problema incluye también a los conductores autorizados ya que muchas veces, «la persona saca la licencia, pero ya no la renueva. Las personas solo se quedan luego con las esquelas y siguen manejando», añadió.
Accidentes, una consecuencia
La principal consecuencia de los conductores infractores son los accidentes, ya que muchas veces desconocen las normas de tránsito. De enero al 2 de noviembre de este año, los conductores sin licencia han ocasionado 3,423 accidentes de tránsito, en los cuales 1,624 han sido solo daños materiales y en 1,798 hubo personas lesionadas.
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Conducir sin estar autorizado para ello es una falta muy grave según el reglamento de Tránsito y Seguridad Vial, la infracción tiene un costo de $57.14. Nuila considera que lo ideal para evitar que se sigan dando más faltas de este tipo es decomisar el vehículo o motocicleta al conductor.
«Desde el año pasado se ha pedido hacer una reforma porque es la única manera de que las personas anden en regla. hay personas que deben miles en esquela y lo mismo les da. Tendría que subirse al arancel de multas y quitar vehículo», reiteró Nuila.
«Hay que hacer concientización para respetar su vida y al andar con sus documentos en regla respeta la vida del otro conductor», añadió el funcionario.
