En horas de la tarde de este domingo 30 de mayo, los sindicalistas que mantenían una huelga de hambre en protesta por el cese de sus contratos en la Asamblea Legislativa decidieron abandonar las instalaciones del Legislativo por su cuenta y firmaron una carta aceptando que su situación se resuelve por mecanismos legales.
Los sindicalistas decidieron retirar sus pancartas y abandonar las instalaciones del parlamento salvadoreño. De igual forma, firmaron una carta en la que aceptaron resolver la situación por vías legales y aceptaron voluntariamente levantar dicha huelga y proceder a reunirse con las autoridades del Órgano Legislativo para resolver su situación.
Desde su cuenta de Twitter, el Sindicato de Trabajadores de la Asamblea Legislativa (SITRAL) aseguró que entrarán en diálogo con la directiva del Órgano Legislativo. Los sindicalistas, miembros de SITRAL, habían mantenido una huelga de hambre desde hace varias semanas asegurando que sus contratos habían sido cesados de manera arbitraria por parte de la nueva Asamblea Legislativa.
Sin embargo, Ernesto Castro, presidente de la nueva Asamblea Legislativa, presentó diversa documentación en la que se reflejaba que la anterior junta directiva del Legislativo había acordado terminar los contratos laborales el pasado 30 de abril, por lo que enfatizó que no era una decisión del actual parlamento sino el respeto a un acuerdo de la anterior legislatura.
De acuerdo con Castro, fueron los mismos partidos a cargo de la junta directiva anterior, ARENA y el FMLN, los que tomaron la decisión y autorizaron el acuerdo que establecía que las plazas de algunos llegaban hasta el 30 de abril.
«Tengan un poco de vergüenza y dejen este drama barato. Sus grupos parlamentarios ya tienen un nuevo presupuesto acorde con su minúscula representación; pídanles que actúen en consecuencia y que recontraten de acuerdo con sus posibilidades a cuanto activista quieran», añadió Castro anteriormente.