El tiempo de confinamiento también ha dejado cosas positivas, sobre todo para Roberto Rodas y Esmeralda Domínguez, esposos, cantantes y propietarios de la Super Cocoband de El Salvador, una agrupación tropical nacida en Sonsonate que está próxima a cumplir tres años de trayectoria.
Para conocer un poco más sobre ellos, uno de sus fundadores, Roberto, habló con «Diario El Salvador».
¿Quiénes son los Cocoband?
Somos una agrupación sonsonateca. Nuestro nombre es la Super Cocoband de El Salvador. Nacimos en el 2020, ya vamos para tres años. Nuestro aniversario es el próximo 28 de diciembre.
¿Cuántos integrantes son?
En total somos 16, más la parte de nuestro equipo de trabajo administrativo.
¿Asumo que el nombre de la agrupación tiene que ver con la relación de Sonsonate y los cocos?
Exacto. A eso se refiere el nombre. La idea surgió hablando con mi esposa. Teníamos bastantes nombres, pero ninguno nos dio la satisfacción de decir este sí, así que nos enfocamos en lo representativo de Sonsonate que son los cocos, y así armamos algo alusivo a los cocos.
Así fue cómo surgió la idea de la Cocoband, pero necesitábamos algo más porque ya existía una agrupación Cocoband en Puerto Rico, así surgió ponerle la Super Cocoband.
Y siendo esposos, ¿cómo es que deciden hacer la agrupación?
Después de tantos años de estar trabajando para varios jefes no teníamos pensado hacer una agrupación, pero la pandemia nos ayudó a acomodar muchas cosas. Nosotros somos un grupo de pandemia porque en ese tiempo nacimos.
Hablé con mi esposa, ella no quería dedicarse de lleno a trabajar en nuestro proyecto, pero yo le dije que era tiempo de hacerlo, ya tenemos 20 años de trabajar en otras agrupaciones y, primero Dios, nos iba a resultar bien. De ese momento para acá ya llevamos tres años.
Era empezar de cero, ¿cómo fue el proceso de crear todo?
Empezamos haciendo casting. Llegó bastante gente, músicos, bailarines, pero no era como lo que buscábamos, eso nos demoró un tiempo.
La delantera, ¿quiénes la componen?
Están Astrid Alvarado, Marta Terezon, Karla Deras, Javier Arévalo, Roberto Rodas, Esmeralda Domínguez y Roberto Rodas.
¿Han pertenecido a otras agrupaciones?
Esmeralda estuvo en la Sonora Dinamita 14 años, en Baby Swing, Grupo Coco, las Nenas de Caña y este año está próxima a cumplir 23 años de trayectoria.
Yo estuve con grupo La Máquina, Melao, la Raza Band y mi última agrupación fue en Los Hermanos Flores.
¿Con la Cocoband han salido a hacer giras internacionales o solo se centran acá?
Nos hemos enfocado en Centroamérica. Ya tuvimos la oportunidad de viajar cuatro veces a Guatemala.
En cuanto al vestuario que utilizan, ¿imagino que su esposa es la encargada?
Sí, de las señoritas más que todo. De los caballeros, bueno… ella también (ríe)
Esmeralda: De hecho, me gusta que los vestuarios sean bastantes vistosos, alegres. Hay ocasiones que amerita que el vestuario sea más recatado y hay vestuario que no. En otras agrupaciones yo me topé con que le dijeron a quién era mi jefe en ese entonces «mire, pero las bailarinas que no vengan», y él se negó totalmente porque son parte del grupo. Eso es lo que hacemos nosotros, porque somos complementos todos y el vestuario es una parte de ello.
Yo soy muy minuciosa con el vestuario. Me gusta innovar. Debe ser algo que no andan todos para que el resultado sea bueno. Igual, uno trata de adecuarse al gusto del cliente.
¿Me imagino que el vestuario cambia según las presentaciones?
De hecho, nosotros que tenemos tres sets, en los tres nos cambiamos. En el último set está la música de la quebradita hasta llevan sus sombreros.
Cuando son fiestas privadas o bodas, ellas van con otro tipo de vestuario.
¿Qué géneros son los que interpretan?
Iniciamos solo con cumbia, pero conforme fue transcurriendo el tiempo hemos agregado otros géneros que la gente pide. Un poquito de todo como bandas, quebradita, bachata. Estamos tratando de cumplir las expectativas de la gente, por ser un grupo 100 % sonsonateco la gente del lado de occidente tiene una expectativa bien grande
¿Hay algún tema propio?
Por el momento solo covers, pero son con arreglos originales
¿Quién es el encargado de los arreglos?
Tenemos un productor que radica en Los Ángeles, California, se llama Nelson Salmerón, y tenemos sonando en las plataformas digitales seis temas. Gracias a Dios estamos trabajando un nuevo tema con su video.
¿Cuáles son esos temas?
Iniciamos con uno que se llama «La gata bajo la lluvia», con arreglos originales en cumbia. Luego, «Como si nada», de allí «La isla bonita». Después, «No se va», y la otra «las Locuras mías» que, por cierto, ese fue un tema que nos dio bastante auge este año. En una televisora salvadoreña fuimos ganadores con ese tema, y el último y más reciente que es «Qué agonía».
¿«Las locuras mías» sonó al mismo tiempo que estaba sonando la de Omar Chaparro?
Sí, salió casi que al mismo tiempo. Generalmente, cuando sale una canción la graban diferentes agrupaciones, pero en El Salvador fuimos los únicos.
¿Han recibido otro reconocimiento?
Sí, nos dieron uno nuestro primer año, en El Coyolito, Chalatenango, de parte de la Fundación El Coyolito, nosotros los apoyamos por una causa. También tenemos de las cabalgatas de Sonzacate y diversas medallas. Tenemos una placa de Long Beach, de Nueva York. Ellos hicieron un festival en Apopa, nosotros fuimos invitados y nos la entregaron. Vamos haciendo nuestra bodeguita de los reconocimientos recibidos.
Entiendo que están con un nuevo tema, ¿de qué trata?
Se lo vamos a dedicar a El Salvador. Es un tema propio con arreglos propios.
¿En cuál género?
Cumbia, pero de la guapachosa.
¿Habrá video?
Sí, se verá paisaje, gente, cultura, comida y lo cumbiambero que somos los salvadoreños.
DE LA MÚSICA AL AMOR
El amor aparece cuando uno menos lo espera o dónde uno menos lo piensa, y eso es justo lo que pasó con Roberto y Esmeralda, quienes luego de ser colegas pasaron a ser esposos y padres de tres pequeños, quienes, al igual que ellos, llevan el lado artístico en las venas.
¿Cómo se conocieron?
Roberto: Fue aproximadamente hace 19 años. Nos conocimos en una agrupación, éramos cantantes y desde ese entonces nos empezamos a hablar, nos enamoramos, pero nunca tuvimos una relación hasta después. Ya estamos por cumplir 15 años de aniversario y hemos formado una linda familia con nuestros tres hijos.
¿Cómo se llaman sus niños?
Esmeralda: La mayor se llama Stacy, el segundo Francisco y el más chiquitín Dereck
¿Me imagino que ha sido complicado el proceso de estar con sus hijos mientras han andado en giras?
Roberto: En un tiempo si fue algo difícil de llevar porque pasaba hasta tres meses y medio de gira, y yo me perdía los cumpleaños de los niños. Ahora, con la agrupación es diferente.
Esmeralda: En mi caso me tocó dejar a Dereck de un mes y medio, por la exigencia de mi trabajo me tocó regresar a trabajar. Incluso antes, hay fotos y videos en YouTube donde estoy embarazada de 8 meses cantando, o trabajando en carnavales.
¿Fue parte del porque deciden crear una nueva agrupación?
Roberto: Ahora estamos con ellos 100 %. Si hay algún evento me los llevo. Si vamos a celebrar algo, al terminar el evento disfrutamos y celebramos con ellos.
Teniendo padres músicos, ¿los niños quieren ser artistas?
Esmeralda: Sí, los tres. El primero está bien metido en la música, el segundo más con los instrumentos y a la niña le gusta el modelar, bailar, fue reina de Sonzacate. Ella es más cuestión artística, alejada del mundo musical.