Isidro Metapán frenó en seco al empatar 1-1 ante el Sonsonate, pero consiguió mantener su invicto y liderato en la zona occidental. Cocoteros y cementeros dividieron honores en un litigio bastante cerrado.
Hasta el minuto 44, el partido entre sonsonatecos y jaguares, dejó muy poco para las crónicas periodísticas y la retina del hincha, ya que en ese lapso de tiempo el duelo tuvo lugar en un intransitable centro del campo y dio pocas luces a la emoción.
A lo sumo, para destacar en más de 40 minutos, fue un remate de Sonsonate al poste, al 13′, uno de Herbert Sosa de los cementeros sobre el travesaño, y uno más de William Maldonado que hizo volar al portero jaguar Óscar Pleitez.
A parte de ello quedó para los registros de un primer acto trabado y ríspido las lesiones de René Gómez, de los cocoteros, en el 11′, y la de Marvin Márquez de los cementeros, en el 37′.
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La desafortunada lesión de Márquez permitió el ingreso de Ricardinho y con él llegó el gol que activó el festejo en los graderíos del estadio Simeón Magaña, donde actuaron los sonsonatecos como anfitriones.
La anotación del brasileño llegó en una perfecta triangulación entre los tres hombres en ofensiva colocados por el profesor Víctor Coreas. Centró Jomal Willams, bajó el balón de pecho John Machado y definió Ricardinho a botepronto.
En la vuelta a las acciones, el panorama cambió y no solo porque Isidro Metapán, que actuó de rosado en la etapa inicial, regresó con su acostumbrado uniforme azul, sino porque los sonsonatecos se volcaron por el tanto de la paridad y este no tardó en llegar.
La primera gran acción de peligro fue un mano a mano entre Jacobo Kattán y Pleitez que terminó favorable para el meta jaguar. El gol, no obstante, rondaba el área calera y llegó con un testarazo, al 57′, gracias a David Boquín que se desvió en un zaguero e infló la red. En adelante el duelo volvió a cerrarse y careció de mayor emoción.
