La cifra de fallecidos por la COVID-19 superó ayer los dos millones en el mundo, y la OMS alertó de la situación catastrófica en Brasil. Mientras que el laboratorio Pfizer anunció retrasos en la entrega de las vacunas y la capacidad hospitalaria en México colapsó.
Los contagios en Sudamérica, también en alza, no se pueden explicar exclusivamente por las nuevas variantes de la COVID-19.
«También fue todo lo que no hicimos lo que causó esta nueva oleada», criticó Michael Ryan, director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS. Además pidió no bajar la guardia con las restricciones.

De los 2,000,066 fallecidos desde el descubrimiento del virus, Europa aparece como la región más castigada con 650,560 muertes, seguida de América Latina y el Caribe (542,410), y de Estados Unidos y Canadá (407,090), según el recuento de la AFP. Europa superó ayer los 30 millones de contagios y, entre los países que experimentaron alzas preocupantes en los últimos siete días, destaca España, donde los contagios aumentaron un 168 % y hubo más de 193,000 nuevas infecciones; seguida de Portugal, que está en un nuevo confinamiento.
Pero la situación también es grave en Alemania, donde se superaron ayer los dos millones de infectados. El número de fallecidos roza los 45,000.
Alemania está viviendo así situaciones más graves que en la primera ola. «Las cámaras frías funerarias están llenas. Estamos en estado de catástrofe», explicó Jörg Schaldach, director de un crematorio. Francia adelantó dos horas su toque de queda a partir de hoy.
México registró su semana más mortífera debido a la pandemia, con un total de 6,885 decesos, según las cifras oficiales difundidas el jueves. El sistema de salud se encuentra desbordado, especialmente en Ciudad de México, de nueve millones de habitantes. La ocupación hospitalaria en la capital llegó al 91 %, según la Secretaría de Salud.
RETRASOS EN VACUNAS DE PFIZER
Las esperanzas en el mundo para pasar la página de la pandemia están puestas en las vacunas, de las cuales ya se administraron al menos 35.61 millones de dosis en 58 países y territorios, según el recuento de la AFP a partir de las fuentes oficiales.
«Esas campañas de vacunación tienen que generalizarse en el mundo, en los próximos 100 días», exigió ayer el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus