Si buscas un lugar para desconectarte de la aglomeración de la ciudad y disfrutar de la naturaleza, entonces Casa 1800 te encantará.
Este negocio se ha convertido en uno de los más solicitados por su diversidad de servicios que incluyen restaurantes, hotel y recorridos. «El restaurante lo abrimos el 28 de marzo de 2017 y todos los materiales que utilizamos para los alimentos son 100 % salvadoreños. De hecho, las bebidas también. Tenemos la horchata que es increíblemente rica», explica Cecilia Arias Molina, gerente general de Casa 1800.
La casa fue construida en 1824 y conserva vestigios de la construcción de barro que tenía en ese entonces. Es patrimonio nacional cultural y eso le da mucho más valor.
«Deseamos que la gente no venga a comer solamente, sino que se lleve esa experiencia tan linda de compartir en familia, de estar en un lugar seguro, lleno de naturaleza y la vista espectacular de Suchitlán», agrega la gerente.
Experiencia con los cinco sentidos
Su carta se acopla a diferentes presupuestos. Hay pizzas, emparedados, platos fuertes y su tradicional sopa de gallina que, según expresan sus administradores, «no pueden dejar de vender, ya que a todo mundo le encanta». En cuanto a postres, la quesadilla es su platillo estrella.
LEA TAMBIÉN: Parques y turicentros abren con capacidad al 75 %
Los platos fuertes van desde $5.25 hasta $69. Es un lugar amplio y fresco para disfrutar los 365 días del año.
Casa 1800 siempre está abierto a sus visitantes. Los horarios son de 8 de la mañana a 8 de la noche.
Con la llegada de la pandemia, Casa 1800 tuvo que reinventarse y asumir la nueva realidad. Han establecido estrictos protocolos de bioseguridad tanto para el área de restaurante como para el uso del hotel.
Todos los comensales deben portar sus mascarillas y solamente podrá ser retirada mientras ingieren sus alimentos.
Casa 1800 es un lugar de ensueño. Puedes llegar acompañado de tus seres queridos y tus mascotas; todos son bienvenidos.