Las selecciones sudamericanas, con Lionel Messi a la cabeza, arrancan el camino hacia el Mundial de 2026 con buena parte de las estrellas que brillaron los últimos años en sus filas, debido a que su talento aún no se extingue y hay dificultades para hallar nuevas grandes perlas.
Aunque el fin de su era está cada vez más cerca, la mayoría de figuras como Messi, Luis Suárez, Arturo Vidal, Neymar y Di María aún no tienen reemplazos a la vista para el inicio de la clasificatoria, cuya primera jornada se disputará entre jueves y viernes.
Ya destacan en Europa y se perfilan como herederos los argentinos Julián Álvarez y Enzo Fernández, los brasileños Vinicius Jr y Rodrygo, los uruguayos Federico Valverde y Darwin Núñez y el colombiano Luis Díaz.
Pero voces advierten que su calidad y número no son suficientes para igualar el nivel de sus experimentados y laureados compatriotas, complicando los recambios generacionales.
«Manejan un fútbol más dinámico, más rápido, más simple, (pero) no con tanto talento (…) No van a estar al mismo nivel de quienes se van», dice a la AFP el DT colombiano Jorge Luis Pinto, mundialista con Costa Rica en Brasil-2014.