Como un gran carnaval para disfrutar en familia o con amigos, el desfile del correo es esperado cada año para dar el banderillazo de inicio de las fiestas patronales en San Salvador.
Los festejos en honor al Divino Salvador del Mundo inician justo con este desfile cada primero de agosto.
Desde la plaza Las Américas, donde está ubicado el simbólico monumento al patrono capitalino, la algarabía empieza con muchas carrozas, enormes, decoradas con brillo, colores alegres y flores.
Algunas llevan reinas, de las carrozas salen dulces volando por los aires, la gente aplaude y espera los regalos que van a llegar por los cielos.
Incluso, hay muchos que se arman de sombrillas para colocarlas al revés, simulando un cuenco, para atrapar más dulces, paletas y bombones.
En este desfile, no pueden faltar los viejos de agosto y las gigantonas de Jocoro. Por el recorrido, la celebración es un derroche de risas y aplausos.
Muchos salvadoreños lo esperan para vivir un momento de sano esparcimiento y revivir las tradiciones, especialmente con las gigantonas con las que aprovechas a hacerse fotos o para huir en medio del desfile de los viejos de agosto, esos personajes de enormes máscaras de la mitología salvadoreña.
La tradición dicta que en este primer desfile, un cartero encabeza la fila, con él lleva un mensaje escrito en un pergamino que será entregado al alcalde en turno para ser leído y entonces dar por inauguradas las tan tradicionales fiestas agostinas y hacer un llamado al pueblo a celebrar.
Estas son fiestas patronales más importantes por ser las de la capital del país y del patrono más venerado: el Divino Salvador del Mundo.