El director de la UNGRD, Javier Pava, advirtió que en la vía donde ocurrió el alud que sepultó varios vehículos tiene puntos críticos con riesgo de deslizamientos de tierra, por lo que ya se iniciaron labores para evaluar dónde debe cerrarse y evitar nuevas tragedias.
Pava detalló que se pidió una «valoración» de todo el corredor vial para conocer las restricciones que se deben establecer y tomar las precauciones necesarias, de manera que «este tipo de cosas no vuelvan a pasar».
El funcionario indicó que este martes se reunirán autoridades colombianas para encontrar soluciones de conexión alternativas entre estas dos importantes zonas del país sudamericano que quedaron incomunicadas tras la emergencia.
El Gobierno de Colombia declaró desde noviembre pasado «desastre nacional» frente a la intensa temporada invernal y llamó a los ciudadanos a tomar las precauciones necesarias frente a posibles riesgos.
Por su parte, el gobernador de Risaralda, Víctor Tamayo, confirmó el traslado de los cuerpos de las 34 personas fallecidas a la sede del Instituto de Medicina Legal para la respectiva necropsia y luego entregarlos a sus familiares.
La Octava Brigada del Ejército explicó que durante la labor de búsqueda del lunes se utilizaron binomios caninos, así como tecnología de última generación para la ubicación de posibles cuerpos.
El alud sepultó a los ocupantes de una camioneta, una motocicleta y un autobús que viajaba de la ciudad de Cali a Condoto, en el departamento de Chocó (oeste).
El Ministerio del Interior informó el lunes que esta semana se instalará un Puesto de Mando Unificado Nacional en Bogotá para estudiar el tema de infraestructura vial, en medio de las condiciones climáticas adversas que sufre el país e identificar así los lugares con más riesgo de deslizamientos por las lluvias y evitar nuevas tragedias.