Milton Tigana Meléndez empezó a ver el partido manos en la cintura. Lanzaba un par de directrices, pero no se exaltaba.
Meléndez seguía sobrio, confiaba en el libreto trabajado en la semana, ese que le había dado resultados desde su llegada al banquillo albo.
Hasta el minuto 26, Adonay Martínez, asistente técnico, tuvo que llegar hasta donde Tigana, pero fue para confirmar que se debía hacer el primer cambio y debía ser por Tamacas, quien ya no tenía para más. Fortísimo revés para la pizarra de Meléndez, porque iba a bajar considerablemente la llegada por la derecha.
Pero el timonel nacional no iba a perder la cabeza. Seguía manos en la cintura a la espera de que los suyos dieran un golpe de timón en cancha.
Y ese golpe de autoridad llegaría a cinco del final del primer tiempo, con Jonathan Jiménez. Meléndez lo gritó a todo pulmón, porque era el tanto que lo podía meter en la ruta de la gloria.
Meléndez estaba de lo más tranquilo en su banco. Los únicos movimientos eran para ajustarse la mascarilla. A lo lejos lanzaba alguna indicación, pero era solo para ajustar.
Para el complemento, Tigana ya no tenía control cercano de su línea de zaga, por lo que no le quedaba de otra que aprovechar las pausas para llamar, sobre todo, a las piezas de marca.
Pero el timonel albo nunca se quitó el chaleco de la tranquilidad. Incluso, cuando había pases erráticos llenó de palmas a los que fallaban.
Fue hasta el minuto 65 cuando apuntó su mirada al banquillo para llamar a Rodolfo Zelaya y mandarlo a la cancha de una vez. La gente alba sacó los aplausos para el 22 y la decisión del estratega albo.
Fue hasta el minuto 75 cuando Tigana interrumpió su tranquilidad y reclamó por una decisión arbitral. De inmediato, Barton llegó para pedirle tranquilidad, y el estratega atendió.
Pero Tigana estaba cerca del éxtasis, cerca de meterse en la historia alba, pero ahora como estratega. Los libros albos se abrieron para el timonel al 78′ con un golazo de Rodolfo Zelaya, quien aprovechó un servicio preciso de Juan Carlos Portillo,para vencer con un torpedo a Benji Villalobos.
Tigana escribía página como campeón, en su faceta de entrenador. Con el título 15 se pone a la par del chileno Ricardo Sepúlveda y el uruguayo Rubén Alonso, quienes han sido campeones con Alianza, como entrenadores y jugadores.
Luego, el tercer tanto fue la cereza al pastel. Tigana ya celebraba en automático. Estaba cerca de abrazar la copa 15 para los paquidermos.