Todas las vacunas contra la COVID-19 aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) han demostrado una alta efectividad y seguridad para ser aplicadas a las poblaciones meta en cada país.
La entidad de salud destacó recientemente en un video informativo que los riesgos de sufrir efectos secundarios graves por la inoculación son menores, si se compara con las complicaciones que puede provocar la enfermedad en una persona que no haya sido vacunada.
«El riesgo de reacciones adversas graves a las vacunas es mucho menor que el riesgo de enfermedad grave o muerte por COVID19», explicó la OMS.
Durante los primeros meses de la vacunación en el mundo surgieron diferentes rumores sobre la producción de trombos como consecuencia de la vacunación, no obstante, la OMS afirma que este hecho es poco frecuente, y los casos registrados, en su mayoría, no están relacionados directamente a la aplicación del fármaco.
«Las vacunas COVID-19 son una herramienta muy poderosa y los efectos secundarios graves, como la coagulación de la sangre, son muy raros», enfatizó la entidad.
En El Salvador, las cinco vacunas (AstraZeneca, Pfizer, Moderna, Sinovac y Sinopharm) disponibles para la población tienen el respaldo de la OMS, las cuales son administradas a los grupos etarios a partir de los seis años.
«Todas las vacunas aprobadas por la OMS han demostrado que los beneficios de la vacunación superan los riesgos de efectos adversos graves», enfatizó la organización.
El plan de vacunación ejecutado por el Gobierno del presidente, Nayib Bukele, lidera la estrategia de inmunización a escala centroamericana, convirtiendo a El Salvador en el país que más dosis ha aplicado.
Hasta el 28 de octubre, en el país se habían administrado un total de 8,516,654 dosis, de las cuales 4,308,437 fueron primeras aplicaciones; 3,789,392 segundas dosis; y 412,754 dosis adicionales (tercera).
De igual manera, el éxito del Plan Nacional de Vacunación permitió la habilitación del proceso para los extranjeros y turistas.
Hasta la misma fecha, el Ministerio de Salud había aplicado 6,071 vacunas a extranjeros, de estas, 5,955 correspondieron a primeras inoculaciones; 56 segundas dosis y 60 terceras dosis. La OMS recomienda que las personas se apliquen la primera vacuna que tengan disponible.