En toda su vida ha aprendido que la música tiene un poder curativo impresionante cuando se trata de las enfermedades del alma, sobre todo, de las inseguridades y miedos. En toda su vida, también, ha aprendido que la música es su forma de expresión favorita y que el éxito radica en mostrarle al mundo su talento y superar el terrible temor al «qué dirán».
Ella es Carol Hills, una joven cantautora salvadoreña con más de una década de experiencia y quien ha ido creciendo y plasmando su nombre en la escena musical de El Salvador. Tras dar a conocer sus canciones en YouTube y tocando en diversos escenarios, Carol dice estar preparada para seguir produciendo y creando más canciones con su característico estilo.
Para Carol, su mejor estilo es plasmar en armonías y letras sus experiencias de vida, entiende que muchas de sus luchas son las mismas que otros jóvenes enfrentan en este país, por lo que considera que, con sus canciones, tiene la posibilidad de conectar con la vida de las personas y sembrar una semilla de inspiración en quienes batallan constantemente contra sus miedos e inseguridades.

Primero contanos, ¿Quién es Carol Hills?
Carol Hills es una persona normal, no siento que sea diferente. Lo único es que mi pasión es hacer canciones y es lo que he querido hacer con mi vida. Además, me gustaría inspirar a otros que deseen hacer su música, hacer sus canciones a través de lo que hago.
¿Cuándo comenzó tu pasión por la música?
Tocó la guitarra desde hace más de 10 años. Tenía 13 años cuando mi mamá me regaló mi primera guitarra y ahí comenzó toda esta historia. Sin embargo, fue a los 16 años cuando escuché una canción que me cambió mi perspectiva de la música y me motivó a hacer mis canciones. Hago canciones desde mis 16 años y, ahora, ya tengo 30, así que ya llevó un buen tiempo haciendo música y compartiéndola con la gente.
Como muchos músicos, comencé aprendiendo y tocando covers. Me gustaba tocar covers de Maná, porque era muy fan de ellos, lo admito, ¡Jajaja! Pero también tocaba punk. Mi hermano me enseñó a tocar guitarra con punk y esos fueron mis inicios en la música
¿Cuál fueron tus principales influencias musicales?
Una de mis influencias musicales ha sido el compositor John Mayer, un cantautor estadounidense que me ha inspirado mucho a hacer mis canciones. Cuando tenía 16 años escuché una de sus canciones y fue cuando me dije que tenía que componer mis propias canciones y hacer mi propia música. También veía MTV y mucha música pop de los 2000, la cual también me influenció mucho.

Tras todo esto, ¿cuándo es que Carol Hills decide dedicarse por completo a la música?
A mis 20 años ya tenía mis demos y quería compartir mis canciones. Mis vecinos me sugirieron subirlas a internet y fue cuando hice mi canal de YouTube y comencé a subirlas. Un amigo músico me recomendó un lugar en Santa Tecla donde estaban buscando músicos. Hice mi página web con ayuda de otro amigo y se la mostré a las personas de este lugar, quienes decidieron darme la oportunidad de tocar en vivo por primera vez.
Cuando tuve esa oportunidad, hace 10 años, sentí que era el empujón que necesitaba. Así fue como también empecé a conocer a muchos de los artistas salvadoreños, quienes con su esfuerzo y trabajo han logrado abrir espacios para otros artistas como yo.
¿Fue ese momento en el que también decidiste tocar tu propia música y no solo covers?
Sí, la verdad es que sí. En ese momento grabé mi primer LP, en 2012, justo cuando comencé a tocar en vivo, y lo lancé al año siguiente. Esto me permitió comenzar a sonar en radios y tener otros espacios para mostrar mi trabajo. Además, empecé a tocar con Indie Colective, un colectivo de música independiente salvadoreña. Tuve la oportunidad de foguearme en el escenario con ellos. Era de las únicas cantautoras del colectivo. Estuve con ellos y me forjó muchísimo interactuar con un público que tal vez no era al que yo me enfocaba, pero que me permitieron crecer musicalmente.
¿Cómo podemos definir el estilo musical de Carol Hills?
Definitivamente es pop. Pero, también hay otras variantes. Me considero cantautora de música pop, pero también hago música electrónica. Al mismo tiempo que iniciaba mi carrera, también dedicaba tiempo a interpretar canciones de música electrónica, un género que he comenzado a retomar nuevamente.
Todos los cantautores tienen ciertas canciones más especiales, ya sea porque son más íntimas o porque narran mejor sus historias de vida. ¿Cuál es la tuya?
Todas mis canciones son basadas en experiencia. Sé que hay otros compositores que toman las experiencias de otras personas, pero es algo que, hasta el momento, no he hecho esa transición. Me gusta componer sobre cosas que entiendo. Toda mi música ha sido bien biográfica. Pero, quizás una de las canciones más personales es la primera canción en español que lancé, que se llama «Imperfecta», es una canción que también la gente ha abrazado bien. Imperfecta es una canción muy profunda y personal al mismo tiempo.
¿Cómo nació esa canción?
Esta canción nace de la inseguridad que yo tenía al principio en mi carrera. Sentía que mi música no era tan buena o que no era tan buena cantante. Aparte, tenía una presión porque, al ser mujer, tenía que verme de cierta forma y cumplir cierto estándar físico. Una noche, después de salir de un programa de televisión famoso, una presentación que me abrumó muchísimo, sentí que debía escribir esta canción. Sentí que no debía disculparme por quién soy o por mis imperfecciones.
Eso significa que la presión por un estándar de aspecto físico ha sido una de las grandes batallas que Carol Hills ha enfrentado para afirmarse en su carrera
Sí, ha sido un aspecto personal muy complicado. En la música hay ciertos estándares de belleza que te quieren obligar a cumplir, y ya no solo hablamos del color de piel, sino de la forma de los cuerpos. Este es un aspecto que también parte de uno mismo. Si vos te aferras a la imagen de las mujeres super delgadas o super en forma y no alcanzás ese estándar, te sentís insegura y pensás que no vas a triunfar.
A mi me pasó al principio. Cuando comenzaba, usaba solo jeans y salía vestida normal. Sin embargo, ahora, he aprendido a usar vestidos en mis presentaciones. Pero, para eso, tuve que realizar un proceso personal para luchar contra todas las inseguridades y sentirme bien conmigo misma, con mi aspecto. Fue un reto para mí. Creo que muchas mujeres luchan contra este esquema físico que se impone. Son luchas muy difíciles.

En toda tu carrera, ¿cómo ha sido el apoyo de tu familia?
Ha sido difícil porque yo vengo de familia de médicos. Mis padres son médicos y, desde pequeña, me gustaba la música. Sin embargo, mis papás lo veían como un hobbie y yo también lo veía así. De niña hacía otras cosas, pero siempre me gustaba cantar. En el colegio, fueron mis profesores de música los que me ayudaron a desarrollar esa parte en mí. Cuando empecé a hacer música, mis papás dudaban de que yo lo hiciera en serio. Toda la conversación social alrededor de la música tiene un impacto en tu concepto personal sobre la música.
Mi camino en la música fue agarrarlo como algo que iba a la par de otra carrera. Mis papás negociaron conmigo para que yo estudiara otra carrera. Fue una brecha que nos separaba a mí de mis papás. Pero hemos ido reparándola poco a poco.
¿Te ha ayudado la música a desarrollarte como persona?
Claro que sí. Con el proyecto de Carol Hills he podido desarrollar muchas cosas que como Carolina no podía hacer. La música sana. Nos ayuda a crecer. En mi caso ha sido la música. Con esto que me apasiona he aprendido a socializar, a dejar de lado la timidez, a construirme como persona, a superar mis inseguridades. En la música he encontrado una forma de ir mejorando muchos aspectos de mi vida. Como te digo, en mi caso ha sido la música, para otras personas será la pintura u otras artes. Pero, sí puedo decirte que la música nos sana como personas.

Tras todos estos años de experiencia, ¿qué le dirías a los jóvenes en El Salvador que sienten miedo de mostrar su talento?
Lo que les diría es que hay que empezar aún con miedo. No será fácil. Te vas a sentir inseguro. Quizás la gente no te va a apoyar de entrada, pero hay que darle, hay que empezar a pesar de todo eso. Si querés compartir algo, hacelo, a pesar de tus inseguridades o de lo que la gente diga. Si no sentís la persona más segura del mundo, no importa, tenés que abrazar eso porque es parte de tu proceso de vida como artista.
¿Qué le dirías a las familias que aún no apoyan completamente a sus hijos o hijas con talento artístico?
La música es una parte importante en el desarrollo de los jóvenes y niños. Si podemos desarrollarlo desde temprana edad, los resultados serán mejores. Le diría a los padres de niños o jóvenes que tiene inquietudes musicales, les diría que los apoyen, que no tiene nada de malo ser músico. Es una profesión y se puede vivir de eso. Les diría que los apoyen, que les permitan crecer, que los dejen conocer ese mundo tan maravilloso que es la música y que es importante para todo ser humano.


