« El Salvador uno de los países más peligrosos del mundo», «El Salvador sigue entre los países más violentos del mundo» «Tasa de homicidios en el país es de 83 por cada 100,000 habitantes» «Pandillas dominan en el país». Estos eran algunos de los titulares que se transmitían cuando gobernaba ARENA y el FMLN, periodo en que los ciudadanos sufrieron una ola de muertes similar a la de la guerra civil, con 70,948 personas asesinadas y más de 30,000 desaparecidos.
Sin embargo, desde el 1 junio de 2019, cuando el Presidente Nayib Bukele y su gabinete tomaron el control del país, la disminución de la criminalidad fue contundente y esto se vio reflejado en las cifras bajas de homicidios, extorsión y otros tipos de delitos al finalizar los primeros seis meses de gestión.
Desde el primer mes de la gestión Bukele los crímenes disminuyeron; junio del 2019 cerró con 217 asesinatos, 68 homicidios menos que un mes antes, cuando aún gobernaba Salvador Sánchez Cerén. Los homicidios disminuyeron a un promedio de 5 diarios y hasta la fecha, mes con mes se sigue en una baja de crímenes sostenida.
Dentro de los resultados más destacados y que alejan al país de las «listas negras», están las capturas en dos meses de más de 35,000 pandilleros y colaboradores producto de la implementación del régimen de excepción y que permitió al Gobierno declarar la guerra a esos grupos criminales. En los primeros dos meses del régimen [abril y mayo de 2022] la Policía despojó a las pandillas más de 800 vehículos, 7,700 celulares y más de $1.2 millones en efectivo producto de actividades criminales.
Pero el bajo accionar delincuencial que se vio reflejado en la disminución de homicidios y otros delitos permitió que desde el mismo 2019, El Salvador saliera de la nefasta lista de los «países más peligrosos del mundo», la tasa de homicidios se redujo drásticamente; de 52 a 18 homicidios por cada 100,000 habitantes, esto según el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP) de México.
El CCSPJP dijo que, debido a una política no complaciente con los criminales, San Salvador dejó el ranking de las ciudades más violentas del mundo en 2019. «En 2020 esta ciudad tuvo una tasa de 19.91 homicidios por cada 100,000 habitantes, esto es, en El Salvador y en su capital la violencia acentúa su tendencia a la baja».
«Cuando entramos al Gobierno, El Salvador tenía una alerta de viaje, que tienen los países más peligrosos del mundo, y nosotros lo cambiamos. Lo concretamos en este período», dijo el presidente Bukele en enero del 2020.
EL 2015, EL PEOR AÑO Y EN LISTA NEGRA
La capital de El Salvador incluso llegó a ocupar el tercer puesto de los «países más peligrosos del mundo»en 2015, año que, desde la guerra, se convirtió en el más violento del país ya que se cometieron más de 6,600 homicidios. La tasa de este delito alcanzó la cifra récord de 104 muertes violentas por cada 100,000 habitantes, la mayor a escala mundial en ese año.
«Quiero dejar bien claro que hace dos años era impensable que El salvador iba a dejar de ser uno de los países más violentos del mundo. Aunque aún somos un país violento, aún sufrimos los embates de la delincuencia, ya no estamos dentro de los 10 más violentos del mundo, cuando antes éramos el primero en el gobierno de ellos [ARENA y FMLN]», dijo Bukele durante su discurso de dos años de gobierno, el 1 de junio de 2021.
LOGROS DEL PLAN CONTROL TERRITORIAL
Las autoridades atribuyen la baja de homicidios y otros delitos a las acciones implementadas por el Plan Control Territorial, estrategia de seguridad insignia del gobierno de Bukele, que incluye la Fase Preparación, la más intensa, y que consiste en el control de los territorios y represión del delito; la II fase que está orientada a generar oportunidades para los jóvenes y prevenir la violencia; la III se refiere a la modernización de las fuerzas de seguridad y la fase IV es denominada Incursión que comprende la presencia permanente de las fuerzas de seguridad en los territorios bajo amenaza criminal y que se vio potenciada con el régimen de excepción.
Dicho plan incluye la recuperación de espacios que históricamente fueron dominados por pandillas, el fortalecimiento de las instituciones de seguridad, la generación de oportunidades de desarrollo para la población y mayormente los jóvenes.
La estrategia de seguridad se puso en marcha el 20 de junio de 2019. San Salvador, Mejicanos, Apopa, Soyapango, Ilopango, San Martín, Santa Tecla, Colón, San Marcos, Ciudad Delgado, San Miguel y Santa Ana fueron los municipios que se intervinieron inicialmente. Fortalecer a la Policía y Fuerza Armada y extremar medidas en cárceles para evitar la comunicación de reos con el exterior fueron puntos que también se incluyeron desde un primer momento por el actual Gobierno.
El criminólogo, Ricardo Sosa asegura que «El Salvador se encuentra por debajo del promedio de tasa anual de homicidios de America Latina esto le permite tener una mejor imagen para la inversión extranjera, turismo, negocios, oportunidades entre otros por no ser el país más violento del mundo, y estar por debajo de países como México, Colombia y Brasil».
El diputado presidente de la Comisión de Seguridad, Eduaro Amaya coincide que «el fortalecimiento y los buenos resultados de la seguridad pública fueron determinantes en el crecimiento económico que ha experimentado El Salvador en los últimos tres años.
Durante el 2021, solo se registraron 1,140 homicidios, siendo el año más seguro de la historia de El Salvador; también la economía salvadoreña creció más del 10%; es decir, esto refleja que mejora el clima de inversión para pequeños, medianos y grandes empresas» afirmó el analista.