Se describe como un hombre luchador y disciplinado. No cree en las coincidencias, pues asegura que «todo tiene un propósito», y por eso les ha sacado el mayor provecho a las situaciones que ha vivido.
En el país, siendo muy joven, fundó junto con otros músicos el grupo Crisol, que tuvo su apogeo a finales de los ochenta e inicios de los noventa.
Luego viajó a México, donde decide definitivamente dedicarse a la música de manera profesional. Este viaje lo emprendió hace 30 años, siempre acompañado por su creatividad para componer y las ganas imparables de presentarse frente al público.
2021: Este año se encuentra nominado a los premios 2021 ISSA Awards (International Singer-Songwriters Association), compitiendo con seis nominaciones. Su sello Se estima que son alrededor de 200 canciones grabadas bajo su autoría en diferentes géneros.
Para apoyarlo, puedes votar por él en el siguiente enlace: https://www.poll-maker.com/QTQKDZ1X8
¿Cómo incursiona dentro de la música y la composición?
En la música yo di inicio a la edad de los 13 años tocando piano, y desde ahí comenzó todo con el teclado y empecé a crear melodías desde entonces. También tomé clases particulares con un gran maestro llamado Francisco Avelar, que en paz descanse, y creo que me dio muy buena formación con mucha técnica para tocar el piano. A los 15 años ya estaba prácticamente haciendo mis primeras canciones, mis primeros temas con música y letra, porque al principio era crear puras melodías y después empezaron las ganas de decir algo también con palabras.
¿Cuál fue su primer acercamiento con los escenarios?
Creé mi primera banda de rock allá a los 16 o 17 años en la época del bachillerato. De ahí ya se formó formalmente un grupo que se llamó Crisol, con el que hicimos prácticamente algo más interesante y profesional. Eso fue entre 1988 y 1989.
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¿Cómo impacta su paso por Crisol en su carrera profesional?
Con este grupo logramos colar un tema que se llama «Amanecer», y fue primer lugar en varias radios del país, y justo a finales de ese año se vino una guerra en la ciudad, la famosa ofensiva del 89. Entonces algunas estaciones tomaban esa canción y otras de Alux Nahual como para tirar mensajes de paz, porque la canción es muy pro paz, con mensajes como: «Que se acabe la guerra, que se acabe la guerra». Esa canción es con la que hacemos un video. Yo estaba terminando mi carrera de Comunicaciones en la universidad Dr. José Matías Delgado y en aquel video, junto con un amigo y reconocido director, hicimos el videoclip y la aceptación fue buena. Tanto que uno de los periodistas destacados en El Salvador lo manda a México y me invitaron a presentar el video en Televisa, una de las televisoras más importantes de México.
Foto: Cortesía
¿En qué momento se decide por una carrera en el extranjero?
Después de esta visita es donde prácticamente comienzo mi vida profesional en la música, porque regresando de México decido dedicarme por completo a ella e irme del país. Tenía 22 años. De ahí me dediqué a mi carrera en México. Fue cuando estando ahí conocí a un editor de la industria que se llama Simón Medina, que trabajaba para Música Fontana/PolyGram, que era un sello muy importante, y eso ya después se disuelve siendo parte de Universal Music.
Ahí es cuando entro, prácticamente, a la industria y firmo un contrato como autor, y el reto fue empezar a crear canciones para otra gente, para otros cantantes, cosa que yo nunca había hecho y ni siquiera me había planteado la posibilidad de hacerlo. Pero, bueno, la vida misma creo que me llevó por ahí y empiezo a relacionarme con autores contemporáneos mayores que yo, otros de mi edad, y otros un poquito menores. En ese momento, pues, todos de alguna manera tratando de hacer las canciones adecuadas para ser grabadas, y ahí muchos personajes que conocí con el tiempo unos se volvieron muy famosos.
¿A quiénes se refiere?
Dentro de los más famosos se encuentra Fato, autor de canciones de Pepe Aguilar y Alejandro Fernández, y Reyli Barba, que en ese entonces era de los menores que yo, pero que ya andaba en esa onda de querer hacer rolas. Ellos son unos de los más conocidos.
¿Qué ha representado para usted construir su propia firma fuera de su país?
Mire, lo que pasa es que todo esto viene de los resultados de muchas experiencias y de muchos sucesos y de muchos eventos. Luego de pertenecer a estas compañías transnacionales y de empezar a mover un catálogo que comienza a ser significativo, pues va pasando el tiempo y te vas dando cuenta de que el negocio está en la buena canción y de que, muchas veces, por no saber cómo se maneja la parte administrativa o la parte audaz de los dineros, por estar mucho en la onda del arte y en el sentimiento y la inspiración, no nos vamos dando cuenta de esa otra parte que es muy importante.
Foto: Cortesía
Después de estas experiencias, ¿qué medidas ha tomado para cuidar su obra?
Llegué a darme cuenta de que había cedido demasiado terreno, demasiados derechos o demasiado porcentaje sobre los derechos de mi obra, y es por esa razón que mejor me volví completamente independiente desde 2001 como artista, porque se acabaron los contratos con las disqueras, y luego, poco a poco, he tratado de jalar el catálogo que ha sido grabado […] tanto de la canción mexicana como de la canción latina en Estados Unidos.
Entonces, es así como decido empezar a manejarme de alguna manera, de forma integral e independiente. Aprendiendo a hacer el negocio. De la otra parte del catálogo todavía hay temas que están pendientes de irse liberando. Desde hace un buen tiempo he estado, digamos, protegiendo mi obra para mi propia marca. Usted ha sido reconocido por la Academia de la Música.
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¿Cómo es recibir un Grammy Latino?
En 2009 llega ese Grammy Latino por mi participación en la grabación de una canción ganadora en música texana [lo reconocen como compositor del corte «Si sacamos cuentas», en la grabación de «Siempre», del grupo norteño Costumbre]. Yo ahorita resido en el sur de Texas y me han grabado mucho por esta zona. Sin embargo, hay muchos planes. Esperamos que esta pandemia permita movilizarnos de otra manera y hacia otros estados.
Hay un grupo en Monterrey, México, que se llama Pesado, y agarraron un tema mío que se llama «Tu sombra». Esa canción, a su vez, le dio nombre al disco y también recibió una nominación, y aunque no se ganó sí se sumó al currículum [la nominación por «Tu sombra» llegó en 2006, en la categoría mejor álbum norteño]. Vale la pena mencionar que con esa canción, «Tu sombra», logramos llegar a los primeros 10 lugares de la lista Billboard. Creo que llegamos al número 6 y estuvimos muchas semanas ahí, como unas 18 o 20 semanas, que es bastante para un tema.
Foto: Cortesía
¿Qué disfruta más de su carrera?
Disfruto las tres grandes áreas que tiene mi trabajo. Disfruto mucho componer canciones; es algo que me encanta. Es una especie de laboratorio personal y de emociones, de fondo muchas cosas, muchas historias y muchas veces las recreo, no necesariamente las estoy viviendo.
Ese trabajo casi siempre se hace en solitario o a veces con algún coautor, depende. Pero es un trabajo muy íntimo. Y la siguiente fase, que es la producción, es ir a grabarla a un estudio, dirigir a un grupo, a músicos, grabar voces o instrumentos; eso también es fascinante. Se hace con muy pocas personas, es decir, las agrupaciones, el ingeniero y se acabó […]. Y la otra fase que es sumamente disfrutable, que es como la cerecita del pastel, es la presentación en vivo.
A mí me encanta cantar mi música, cantar las canciones que me han dado muchas satisfacciones y de alguna manera agradecer al público que me ha seguido y que se Tato se siente muy orgulloso de cómo ha evolucionado su carrera artística. sigue sumando. Cuando el público las canta es la magia, es una sensación indescriptible. Es como decir: se cumplió el ciclo, la meta. Ya tenemos muchos años haciendo conciertos, giras, shows, y afortunadamente podemos decir que hemos logrado realizarnos en la vida, porque no siempre es fácil dedicarse a lo que uno ama.
¿Cuáles fueron esas oportunidades de superación a las que usted se enfrentó?
El hecho de haber caído con algunas personas no adecuadas y el haber pasado por México, que es una escuela muy fuerte en la industria. Ahí hay mucho gusto por el arte. El mexicano es muy alegre, muy cantador, muy bohemio, muy romántico y muy bailador. Entonces, como que toda la música pega en México, siempre y cuando esté bien hecha. Una de las cosas que agradezco haber aprendido en México es haber aprendido a profesionalizarme, a disciplinarme y a hacer las cosas correctamente.
Creo que México es un país que le abre las puertas al extranjero, pero más que eso es el trabajo que tú hagas, tu actitud y, obviamente, tu dedicación es la que hablará por ti. El trabajo es lo que te defiende. En mi caso, si hago bien las canciones, si realmente las pulo y me pongo a hacer un trabajo profesional con ellas, pues obviamente voy a tener un efecto positivo.
Foto: Cortesía
¿Con qué otras celebridades ha tenido la oportunidad de presentarse?
He compartido escenarios con mucha gente; entre ellos, Enanitos Verdes, que son amigos también, así como el grupo Elefante. He compartido escenario con don Facundo Cabral, que en paz descanse; fue un gran maestro. Luis Eduardo Aute. Tuve la oportunidad de estar en el mismo escenario con Sasha, con Lucero, Érick Rubín. Son muchos, la verdad. Ana Cirré. Ya son varios años de andar en esto. Serán unos 30 años de vida artística. Desde 1989 que ando en esto. Debuté con la canción «Amanecer», que salió en las radios.
¿Qué otros proyectos se avecinan para Tato y su firma?
Recientemente lanzamos un disco, el año pasado, en media pandemia. Lo inscribimos también a la Academia porque soy miembro votante de la Academia Latina de Artes y Ciencias, de los Grammy Latinos. Tuvimos muy buenos resultados. No alcanzamos, desafortunadamente. Anularon mi nominación al premio, pero sí entramos dentro de los trabajos más votados y más reconocidos, y eso me dio mucha satisfacción porque empecé a tener contacto con otros productores, ingenieros, con gente que está en ligas muy pesadas, y de todos ellos recibí muy buenos comentarios.
Se me empezaron a abrir nuevas alianzas. Te menciono esto porque el disco se llama «Cósmico», y la gente la puede escuchar en plataformas digitales. Estamos por lanzar el tercer sencillo de este disco, que se llama «Mi universo eres tú». Es una canción eminentemente romántica, pero tiene que ver con los amores estelares, galácticos.
Ahorita estoy esperando que todo esto se empiece abrir. El estado de Texas dentro de poco abrirá al 100 % y nada más estamos en eso para arrancar con muchos pendientes que dejamos a raíz de la pandemia, como giras confirmadas, visitas a lugares maravillosos […], pero hemos tenido que esperar, al igual que todos. Mientras tanto, hemos seguido produciendo, componiendo y acercándonos mucho a la gente por las redes sociales. Tuve que adaptarme porque yo no era muy afecto a las redes sociales.
UN CARRERA MARCADA CON MUCHOS FRUTOS Y ALEGRÍAS
1989: Forma parte del conjunto salvadoreño Crisol y junto con ellos popularizó el tema «Amanecer». Una pieza con una letra pro paz que se convirtió en aliento para muchos durante la época del conflicto armado en el país.
2006: Recibe nominación al Grammy por «20 Mil Heridas», de Banda Machos, y además fue nominado al Grammy Latino por «Tu sombra», de grupo Pesado.
2009: Gana su primer premio Grammy Latino por su participación en «Siempre», del grupo Costumbre.
