El combate a la pandemia de la COVID-19 y la recuperación económica tras los efectos de la crisis sanitaria son los dos grandes desafíos que enfrentará Estados Unidos ahora bajo la presidencia del demócrata Joe Biden. De la respuesta que Biden dé a estos problemas dependerá mucho lo que pueda conseguir en otros aspectos como la reforma migratoria, señaló esta tarde el director ejecutivo de Alianza Américas, Óscar Chacón.
Para Chacón, las posibles respuestas que la administración Biden pueda dar al tema migratorio dependerán enormemente del manejo que se haga de la crisis sanitaria provocada por la pandemia y de cómo la nueva presidencia promueva una recuperación económica para todo el país norteamericano.
«Dos de los más grandes desafíos que enfrentará la presidencia Biden serán cómo atacar esta pandemia para que deje de causar el nivel de año que ha causado y, por otro lado, cómo manejará las implicaciones económicas que ha tenido la pandemia. Esos serán los dos más trascendentales desafíos. Si en estos dos campos no logran una gestión exitosa, lo demás se complicará», aseguró.
En ese contexto es donde, para Chacón, entraría el tema migratorio, el cual basaría su éxito en lo que Biden logre en los desafíos antes mencionados. «El tema migratorio no es el tema más universal que representa desafíos para Estados Unidos. Hay otros dos que son cruciales. Si en esos campos no hay una iniciativa rigurosa y robusta, se va a complicar el poder actuar en otros campos, como el de la política migratoria», señaló.
Chacón destacó los avances que la administración Biden realizó en los últimos días previo a su investidura. Además, remarcó que se prevé la firma de varios decretos ejecutivos que frenen lo ratificado por el ahora expresidente Donald Trump, sobre todo, en el tema migratorio.
«Lo primero que hay que destacar es la propuesta que van a transmitir al Congreso. En este sentido el presidente esta cumpliendo con una propuesta de campaña de girar una propuesta migratoria. Este presidente está buscando revertir todo lo que se pueda de lo que hizo el presidente anterior. Pero parte de este proceso va a requerir de mas paciencia porque hay cambios que no se consiguen solo con orden ejecutiva. Ese proceso por muy rápido que se pueda llevar a cabo va a demorar 10 o 12 meses para que hagan efecto», añadió.
Finalmente, Chacón hace hincapié en los obstáculos que Biden pude llegar a encontrar en el Congreso, donde demócratas y republicanos se han dividido los espacios y donde necesitará, a juicio del analista, maniobras creativas para poder obtener los resultados que han prometido en diversos temas de país.
«Si el partido demócrata quiere impulsar reformas en campos múltiples y no tiene el voto de por lo menos 10 republicanos, eso pudiera significar una traba. La otra alternativa es negociar procesos que son obligatorias en Estados Unidos como lo son los presupuestos de cada departamento, donde por lo general se pueden negociar. Hay posibilidades de que se pueda trabajar aun cuando la situación en el Senado sea precaria», declaró.