El beneficio que proporcionan las vacunas contra la COVID-19 reduce hasta el 60 % la posibilidad de reinfectarse con el virus, esto según un estudio desarrollado por el Servicio de Epidemiología de la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid.
«Los epidemiólogos insisten en que la inmunización evita formas graves de enfermedad y, aunque no impiden la transmisión, sirven para disminuir la infección y la reinfección», destaca la revista española Gaceta Médica en una publicación donde citó el referido estudio.
A más de un año de iniciada la vacunación contra el coronavirus, la evidencia científica demuestra que estas son efectivas para prevenir las formas graves, la hospitalización y la muerte ante cualquiera de las variantes que han surgido en el tiempo que va de la pandemia.
«La mayor parte de los casos analizados cursan con formas leves, gracias a que el estado inmunitario de la persona se encuentra más protegido (al haber estado ya en contacto con el virus), y especialmente debido a la protección que ofrecen las vacunas», señaló el estudio.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que se continúa estudiando la afectación ocasionada por ómicron, variante cuya transmisibilidad ha superado a la de delta, pero, el cuadro clínico suele ser menos leve, de acuerdo con los expertos.
Ante este escenario, la OMS afirma que es mejor estar vacunado a no estarlo, ya que incluso, si una persona está vacunada, puede reinfectarse con cualquiera de las variantes existentes del virus; sin embargo, la afectación sería menor en comparación a no tener los anticuerpos que proporciona la vacuna.
«Es importante recordar que la reinfección, incluso en personas vacunadas, puede producirse con todas las variantes, por lo que deben mantenerse y reforzarse todas las medidas de salud pública para evitar el contagio y la propagación del virus. Dado que ninguna vacuna es 100% efectiva, es necesario continuar con todas las medidas preventivas, incluso después de la vacunación.
Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) afirman que las vacunas siguen siendo efectivas para proteger a las personas, sobre todo, cuando el virus sigue mutando y produciendo nuevas variantes que propician las reinfecciones, como en el caso de ómicron.
«Los virus cambian constantemente, incluido el virus que causa la COVID-19. Estos cambios pueden desencadenar la aparición de variantes (cepas nuevas del virus) y pueden incrementar el riesgo de reinfección», indicaron los CDC en su página web.
Las medidas de bioseguridad son una estrategia que funciona contra cualquiera de las variantes del virus, por lo que las autoridades sanitarias internacionales exhortan a mantener una higiene constante de las manos, el uso de mascarillas, estornudar o toser en el codo, mantener una distancia de al menos un metro de otras personas, evitar las aglomeraciones y mantener los espacios bien ventilados, para prevenir la infección o reinfección por la COVID-19.