En los últimos meses del año, la región centroamericana registra el impacto de vientos nortes, los cuales se forman debido al sistema de alta presión que impulsan los frentes fríos hacia el golfo de México, el Caribe y el norte de Centroamérica.
Según fuentes del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), los meses con mayor presencia de vientos nortes son noviembre, diciembre y enero, con al menos tres eventos en cada mes. Dicho fenómeno atmosférico es propio de la época seca, que en el país inicia entre octubre y noviembre, y finaliza entre abril y mayo.
En ese sentido, los vientos nortes están relacionados con los frentes fríos, masas de aire frío que se desplazan desde Norteamérica cuando es el invierno en el hemisferio norte. En la época seca pueden ingresar plenamente al país porque ya no hay presencia de fenómenos ciclónicos como huracanes o tormentas.
«Los frentes fríos se dan en la época seca porque en la época lluviosa vienen ondas, depresiones tropicales o huracanes que se mueven de este a oeste. En la época seca gobiernan los sistemas del norte y se barre la humedad debido a estos frentes fríos», explicó Lorena Soriano, coordinadora del Centro de Pronósticos Meteorológicos del MARN.
Según la especialista, por el momento no se espera un acontecimiento próximo de vientos nortes, pero advirtió que es probable que en lo que resta del mes haya uno. El más reciente en el país se registró durante la primera semana de diciembre de 2020.
PROPIOS DE CENTROAMÉRICA
El sistema de alta presión es el generador de los vientos nortes en Tehuantepec y el norte de Centroamérica. Esta alta presión, por lo general, tiene una forma de cuña y se orienta sobre Guatemala, Honduras y El Salvador. Dicho fenómeno atmosférico se pronostica por medio de modelos numéricos.
Es por ello que los vientos nortes son característicos de la región centroamericana y de algunas partes de México. Se forman en esta zona porque están asociados a los frentes fríos que bajan de Norteamérica y también influyen las características topográficas de la región.
«Los vientos nortes son una condición bien regional. Esto sucede porque el sistema de alta presión lo que hace es orientarse en forma de cuña anticiclónica, cosa que no lo hace en otro sector. Esta se forma en Centroamérica y parte de México, y por eso los vientos se dan ahí. Cuando se traslada al este, al lado del Caribe, ya no tienen esa formación», dijo Soriano.
La especialista mencionó que aún se estudia el impacto que el cambio climático tiene en el aumento o la disminución de los frentes fríos y de los vientos, y todavía no se puede definir con precisión si influyen en la prolongación de su llegada, la cual se ha registrado en los últimos años.
«Estas condiciones, en alguna medida, están asociadas a variaciones en el clima. Eso significa que en algunos años se pueden incrementar o disminuir los vientos nortes debido a aspectos relacionados con los cambios de clima», indicó Soriano.
Representantes de The Nature Conservancy (TNC) indican que ya se asocian variaciones en las estaciones y épocas del año en algunos países del mundo debido al cambio climático, e incluso especies de aves y alces han modificado su época de llegada a las zonas de migración debido a las alteraciones en el clima.
IMPACTOS EN LA POBLACIÓN
El levantamiento de techos y la caída de ramas y vallas publicitarias son algunas de las principales afectaciones producidas por los vientos nortes. Las zonas altas son los puntos donde se perciben de forma más fuerte y acelerada. También se encuentran en riesgo los espacios cerrados, donde el viento se puede encañonar, como entre los edificios. Asimismo, en las zonas costeras pueden afectar la pesca artesanal al crear condiciones turbulentas en el agua, como el mar picado.
«A los señores pescadores les damos recomendaciones, y ellos conocen ya las condiciones del clima. Por lo general, ellos también buscan conocer la información atmosférica pertinente», detalló Soriano.