Estados Unidos y Panamá firmaron un memorándum de entendimiento para ampliar las deportaciones de migrantes en situación irregular que crucen en la selva del Darién, sin importar su nacionalidad.
El Subsecretario de Estado Adjunto Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, del Departamento de Estado, Eric Jacobstein, detalló que se trata de un programa piloto que contará con el financiamiento de $6 millones.
Jaconsein aclaró, en una conferencia virtual este martes, que las repatriaciones se realizarán «tan pronto como sea posible», sin tomar en cuenta de dónde provengan las familias. «Van a haber repatriaciones en las próximas semanas», insistió al ser cuestionado sobre la vigencia del nuevo acuerdo.
Los fondos, proporcionados por el Departamento de Estado, serán destinados para que Panamá tenga la capacidad de hacer cumplir sus leyes de inmigración y proceder a las operaciones de deportación, indicó el Subsecretario Adjunto Principal de Comunicaciones Departamento de Seguridad Nacional, Luis Miranda.
Desde enero 2024 hasta el 28 de junio, hubo un tránsito por la selva del Darién de unas 197, 389 personas, según el Servicio Nacional de Migración de Panamá. El año pasado cerró con el cruce de más de 520,000 migrantes.
Miranda explicó que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) será el responsable de llevar a cabo el programa de asistencia exterior, con la colaboración «técnica y la logística, y la capacidad de incluir a la organización de transporte aéreo», manifestó.
«DHS tiene la experiencia en la materia, apoyaremos en el entrenamiento y desarrollo de capacidades e institucionalizaremos procesos seguros y humanos en Panamá, incluida la evaluación adecuada a reclamos de protección», agregó.
Según las autoridades, se trata de un proyecto panameño que ya había sido impulsado en el país, pero que desean potenciar.
«Estados Unidos dará apoyo para ayudar a Panamá a repatriar rápidamente a los migrantes que no tienen una base legal para permanecer en el país, conforme a las leyes internas y sus obligaciones internacionales y respetando los derechos humanos», expuso la asistente Especial del Presidente y Coordinadora de la Declaración de Los Ángeles, Marcela Escobari.
«Reconocemos que la situación en la selva es insostenible y en muchos casos trágicos, esperamos que esta decisión disuada a los migrantes y a sus familias de ponerse en el riesgo que implica cruzar el Darién», reiteró.
Escobari invitó a las personas a acudir las vías legales para ingresar a Estados Unidos. «Seguiremos aplicaron duras consecuencias para quienes no tiene una base legal para permanecer en Estados Unidos», afirmó Miranda.