Después de las elecciones generales que se celebraron en febrero y marzo del presente año, el mapa político partidario relegó al FMLN, instituto con únicamente dos diputados en el Parlamento Centroamericano (Parlacen), lo que para algunos analistas se traduce en una «incidencia política nula» y el «preludio de su desaparición».
David Hernández, máster en Ciencias Políticas, considera que «la situación actual del FMLN es difícil, ya que ha quedado reducido a su mínima expresión, sin diputados y sin alcaldes, únicamente con dos diputados al Parlacen, que en realidad no tiene ningún rol e importancia».
Muy parecida es la opinión del abogado, notario y experto en temas electorales Juan Gilberto Contreras, quien señala que, «si los resultados han sido malos [para algunos partidos], quiere decir que la representación que hacen de la población ha tenido una caída considerable. En el caso del FMLN, creo que ya no representa los intereses del pueblo, sino que los de un reducido grupo de su dirigencia».
Ambos analistas coinciden en que lo que originó los desastrosos resultados para el FMLN es que, mientras estuvo en la cima política, es decir, cuando era uno de los favoritos de la población y dirigió el país desde la presidencia, fue, en palabras de Hernández, «incoherente con su discurso y no cumplió las promesas que le hizo al pueblo, sino que se dedicó a robar a manos llenas, además de pactar con las pandillas».
Hernández agrega que, con ese antecedente, la población optó por darle un voto de castigo y dejó fuera a los efemelenistas, dándoles únicamente dos escaños en el Parlacen.
Contreras afirma que «la incidencia política que tendrá el FMLN desde ese organismo regional será nula debido a que las decisiones del Parlacen no son vinculantes en nuestro país; es decir, no son obligatorias, pues tratan temas regionales que no impactan directamente a El Salvador, además de que «tiene que haber un consenso casi unánime para tomar decisiones».
Inclusive Eugenio Chicas, exdirigente del FMLN, considera que «el FMLN tiene larga vida, ARENA tendrá larga vida; el problema es que esa larga vida no vaya a ser vegetal, o sea, alguien puede tener larga vida conectado a un respirador y sin aportar absolutamente nada a los temas estratégicos del país».
«El tema no es si se respira o no se respira, el tema es qué capacidad de aporte estratégico tienen estos partidos en cuanto a los problemas que vive el país», mencionó.
Los analistas políticos señalan que tener dos parlamentarios no garantiza que el partido pueda recuperarse, pues tiene un «margen de acción limitada». «El FMLN materialmente ha desaparecido de la vida política, aunque formalmente exista como partido, pero como no tiene ese margen de acción o decisión, está en una irrelevancia política, que es el preludio de su desaparición», sentencia Contreras.
Hernández agrega que con la división interna que enfrentan los efemelenistas, con muchos de sus dirigentes huyendo por casos de corrupción, «es muy difícil que recuperen algún tipo de caudal de votos para las próximas elecciones» legislativas y municipales, a realizarse en 2027.