Uno de los órganos de propaganda de la oposición se dedicó a difundir una noticia falsa: que el Gobierno del presidente Nayib Bukele había suspendido el subsidio del gas licuado, utilizado por la mayoría de la población para cocinar sus alimentos.
Rápidamente, los troles y demás fauna similar empezaron a hacer eco de la noticia falsa y a decir que la cancelación del subsidio del gas era parte de la «medicina amarga» de la que habló el presidente Bukele en el discurso de inauguración de su investidura. El bulo buscaba dañar la imagen del presidente, tratando de erosionar la confianza entre el gobernante y su pueblo.
El Ministerio de Hacienda desmintió la información engañosa y reiteró que el subsidio del gas propano se mantiene para 1.2 millones de hogares que forman parte del listado de beneficiarios, según lo establecido en la ley.
Al respecto, cabe destacar que cualquier información oficial sobre el subsidio del gas será proporcionada únicamente por la Dirección General de Subsidios (DGS). La única forma por la que una persona deba pagar el precio de mercado del gas es cuando el sistema informático haya detectado que hay varios subsidios asociados a un mismo DUI.
En este caso, la DGS investiga el caso para que los beneficios otorgados por el Gobierno del presidente Bukele lleguen efectivamente a quienes lo necesitan. Cualquier denuncia o reporte de problemas puede hacerse al 2237-3333 y por WhatsApp al 7072-2484, del Ministerio de Hacienda.
Este tema, por otra parte, nos muestra la importancia de constatar información, sobre todo si proviene de una fuente interesada, como en este caso un periódico que se ha declarado abiertamente opositor al Gobierno y distribuye «noticias» contrarias, tanto que incluso tenga que inventarlas para cumplir con la misión que le han encomendado.
En las redes sociales y en algunos sitios web hay personajes que buscan aceptación y clics para atraer anunciantes o ganar notoriedad, sin importar que para ello tengan que mentir en el contenido que crean, aunque lo envuelvan en ropaje «noticioso».
Los sectores que perdieron sus privilegios y dejaron de saquear el Estado son los principales interesados en distribuir información falsa para tratar de afectar al Gobierno. Ya el pueblo salvadoreño se expresó en las urnas, no una, sino varias veces, para optar por el presidente Bukele y su proyecto político, precisamente porque ha sido el único que ha demostrado que está a favor de los ciudadanos.