El sociólogo René Martínez asegura que el «discurso ganador» que pregona el excandidato presidencial del FMLN Manuel Flores es su «coartada» para hacerse con la secretaría general del partido.
«El demagógico discurso triunfalista del Chino [Manuel Flores] es su coartada para ganar la secretaría [general] del FMLN y seguir haciendo lo mismo», escribió Martínez en su cuenta de X.
Flores expresó la semana pasada que buscará llevar la conducción del partido rojo para los próximos cinco años, luego de que Óscar Ortiz anunció que dejará la secretaría general tras la debacle electoral de febrero y marzo.
De recibir el respaldo de los militantes en las elecciones internas, el excandidato presidencial efemelenista deberá conducir al instituto político para las elecciones municipales y legislativas de 2027 y los comicios presidenciales de 2029.
Ortiz deberá dejar el cargo a más tardar en septiembre próximo; sin embargo, el tiempo para seguir en el mismo dependerá del cronograma de transición que el partido establezca para elegir a su nuevo liderazgo.
El FMLN tuvo su peor derrota electoral este año al no poder retomar el Ejecutivo, no ganar ninguna curul en la Asamblea Legislativa —por primera vez en su historia político-partidaria—, no obtener ningún municipio y solo obtener dos representantes ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen), con sede en Guatemala. En 2021 ganó cuatro escaños legislativos, 30 alcaldías y un diputado del Parlacen.
Dos años antes, en 2019, no pudo retener el Ejecutivo con su entonces candidato y excanciller de la república, Hugo Martínez. Tras las elecciones de este año, Flores ha tenido un discurso triunfalista, fundamentado en que el FMLN es la segunda fuerza política del país, pero los resultados obtenidos en las urnas distan mucho de los logrados en 1994.
Hace 30 años los rojos participaron —tras dejar la lucha armada— en su primera elección popular, forzando al partido ARENA a disputar la presidencia de la república en una segunda vuelta electoral. En los comicios de 1994 ganaron 21 de 84 diputaciones de la Asamblea Legislativa, 15 gobiernos municipales (dos de estos en coalición) y cuatro diputados ante el Parlacen.
El FMLN ha culpado de su derrota electoral al Ejecutivo de Nayib Bukele y a la falta de recursos económicos provenientes de la deuda política a la que como partido tiene derecho. También culpa al Tribunal Supremo Electoral.