La única diputada del partido VAMOS, Claudia Ortiz, reconoció que los Acuerdos de Paz, de 1992, fracasaron y que los gobiernos anteriores fueron incapaces de ejecutar acciones como la reparación de las víctimas de la guerra civil.
«Trabajemos para cumplir lo pendiente: justicia a las víctimas del conflicto (superar impunidad), independencia del sistema judicial [y] desarrollo económico y social», reconoció la legisladora en Twitter, aunque su proceder ha ido en sentido contrario, pues durante toda la actual legislatura se ha negado a apoyar el trabajo del Gobierno del presidente Nayib Bukele.
Los Acuerdos de Paz fueron suscritos entre el Estado salvadoreño (en ese entonces administrado por el partido ARENA) y la guerrilla (ahora partido FMLN) el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, México.
Después ambos partidos aprobaron, en 1993, una ley de amnistía para perdonar y olvidar los crímenes que el viejo Ejército y la guerrilla perpetraron durante el conflicto armado en perjuicio de la población, que sufrió la baja de más de 80,000 personas durante 12 años.
En 2012, durante la presidencia del prófugo efemelenista Mauricio Funes, el Estado salvadoreño fue condenado por la masacre de El Mozote.