Las buenas prácticas agrícolas son definitivas ante los efectos del cambio climático, en donde la prevención juega un papel determinante para lograr una mejor productividad de los cultivos.
En ese contexto, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) capacitó a productores para eliminar hongo que afecta los cultivos de sandía, luego de que se reportara una plaga en Intipucá, en La Unión.
«Los técnicos de la Dirección General de Sanidad Vegetal hicieron un diagnóstico en el Laboratorio de Fitopatología del MAG, y los resultados fueron presentados a los agricultores el miércoles 14 del presente mes», informó la institución en un comunicado.
Erasmo Perla, jefe de Sanidad Vegetal de la región oriental, dijo que el causante principal es el hongo Fusarium, que ataca a las cucurbitáceas (sandía melón, pepino, entre otras) y las hortalizas (chile dulce, picante, tomate, entre otras).
Los síntomas que hace el hongo Fusarium son amarillamiento de la hoja, las cuales también presentan manchas de color marrón, afectando el desarrollo de las plantas en forma general, porque daña el sistema vascular, y por tanto el movimiento de los nutrientes se ve atrofiado.
Perla aseguró que este hongo habita en el suelo y puede permanecer en el lugar alrededor de tres años, pero al ser la primera vez que se presenta en la zona de Intipucá es probable que alguna planta o semilla de sandía haya estado contamina con él y que haya contagiado a los demás cultivos.
«Los hongos se reproducen por las esporas que pueden contaminar plantaciones de alrededor, porque viajan por el viento y por el agua lluvia, hasta 400 kilómetros por el viento (…) Además, este patógeno prefiere los climas calientes y hay condiciones a que se prolifere, como el pH ácido de los suelos y humedades prolongadas de los suelos», añadió el técnico del MAG.
Ante lo resistente que es el Fusarium, el MAG trabajará de forma conjunta con los productores de la zona para acabar con el rastrojo.
«En primera instancia manejaremos de forma adecuada el rastrojo, arrancándolo y lo destruiremos con quema controlada. También sugerimos rotación de cultivo con el fin de romper el ciclo de la enfermedad, se sembrará maíz, frijol y maicillo», subrayó Perla.
Las capacitaciones se seguirán promoviendo en el lugar, y se enfocarán en las buenas prácticas agrícolas, la inocuidad de los alimentos y el manejo de agronómico de los cultivos.
Asimismo, se trabajará en el análisis de suelo para saber la fertilidad y la situación fitosanitaria; y se tendrá una semilla certificada para saber la calidad fitosanitaria de la misma.
Ante las acciones que se realizarán, los productores de la zona se mostraron conformes y esperanzados en conocer nuevas prácticas, las cuales les ayudarán a prevenir las plagas.