La estelar montañista Alfa Karina Arrué tuvo esta mañana la oportunidad de compartir con un grupo variado de personas, la experiencia que vivió al conquistar la cima del Monte Everest, durante un conversatorio que organizó la Dirección de Cultura y Deportes de la Asamblea Legislativa.
Todos, jóvenes y adultos escucharon muy atentos los detalles y anécdotas que al ritmo de las fotografías y videos que se iban mostrando, ella les iba narrando de cómo fue superando cada obstáculo encontrado en su camino y que debió superar para llegar a la cima del mismo y ver concretado su sueño, de ondear la bandera de El Salvador en el punto más alto del mundo.
«Lo importante es que no debemos renunciar a nuestros sueños, hay luchar duro por alcanzarlos y en esto es importante mantener disciplina y mucha fuerza física y psicológica, tan necesaria para salir siempre adelante», dijo Alfa Karina.
Agregó que esos valores fueron para ella tan importantes, como por ejemplo cuando se llegó el momento de entrar en lo que los montañistas llaman «Zona de la Muerte», que está arriba de los 7,800 metros sobre el nivel del mar.
«Ya a estas alturas el riesgo de muerte es muy latente y nos acompaña de forma permanente, por eso es importante además de llegar en excelente condición física, con una fuerza mental que nos ayude a superar todo obstáculo por difícil que parezca», comentó Alfa Karina.
Por eso mencionó que no sólo un deportista, si no cualquier persona en general debe estar dispuesta a enfrentar y resolver todos los desafíos que la vida le presente, para sustentar este punto, trajo a colación el complicado trance que experimentó tras su divorcio, que sólo pudo superar con mucho temple y carácter.
Otro desafío que mencionó y que enfrentó de entrada tras llegar a Katmandú capital de Nepal, fue el tener que tomar otro avión y aterrizar en el Aeropuerto de Lukla, uno de los más complicados a nivel mundial para hacer los aterrizajes y solo pilotos experimentados y certificados viajan para este aeropuerto.
«No fue fácil experimentar esa experiencia, pero realmente solo fue el comienzo del duro camino que me esperaba, por eso por muy imposible que parezca el alcanzar un sueño, no debemos renunciar nunca», reiteró esta destacada deportista que ha inscrito su nombre con letras doradas en el deporte nacional.