Más del 90 % de los estudiantes de segundo año de bachillerato de instituciones públicas y privadas de Ahuachapán, Sonsonate, Santa Ana y La Libertad participaron ayer en la prueba AVANZO, durante su primer día de aplicación.
Hasta el cierre de esta nota, más de 20,000 estudiantes habían completado la prueba, lo que evidencia un amplio alcance en la población estudiantil.
El Secretario de Innovación, Vladimir Hándal, destacó que ayer, hasta las 10 de la mañana, más del 33 % de los estudiantes ya habían participado. De la misma forma, indicó que el 90 % de los alumnos completaron la prueba desde su celular, una plataforma para la que AVANZO estaba diseñada.
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«Ya comprobamos por parte de los usuarios que la plataforma es cómoda, bonita y se puede leer fácil. Esperamos que todo siga fluyendo con normalidad. Los operadores de internet no han reportado fallas», comentó Hándal.
El entusiasmo estudiantil por llevar a cabo la evaluación fue percibido por la ministra de Educación, Carla Hananía, quien visitó ayer algunas casas de estudiantes en Antiguo Cuscatlán para conocer de primera mano cómo estaban desarrollando el proceso.
«Este día, el país da un salto importante en el avance tecnológico, importante en la agenda digital que se ha iniciado por educación. Es la primera prueba estandarizada realizada totalmente en línea. Estamos verificando que en las casas de los alumnos la mayoría ha optado por el teléfono. Estamos optimistas y contentos de ver cómo han recibido la prueba», expresó la ministra de Educación.
La funcionaria fue acompañada por Vladimir Hándal, secretario de Innovación, y por Fabrizio Mena, subsecretario de Innovación. Hándal explicó que, por parte de la Secretaría, la inversión en la prueba ha sido aproximadamente de $200,000, específicamente en plataformas, seguridad y auditorías.
Los jóvenes accedieron a la plataforma con facilidad y explicaron que se trata de un espacio pertinente a la formación digital que han construido durante 2020. Uno de ellos fue Alexis Minero, estudiante del Instituto Nacional de Antiguo Cuscatlán, quien dijo tener altas expectativas sobre la prueba y espera obtener buenas calificaciones para estudiar una ingeniería en el futuro.
«Quiero demostrar que soy capaz de lograr mucho, y AVANZO es un reto para todos los estudiantes del país, pero, a la vez, es una oportunidad de sobresalir y demostrar que, a pesar de las dificultades, hemos aprendido», comentó Minero.
Padres de familia también evaluaron como un aporte positivo la creación de un espacio virtual donde se evaluarán los contenidos priorizados durante la pandemia y se incluyan en un examen innovador.
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«Para nosotros es una bendición que, a pesar de haber vivido una pandemia, mi hijo siguió estudiando. Mi meta es que él tenga éxito y pueda tener una carrera profesional», expresó Miriam Rodríguez, madre de familia.
En todo el país, se han habilitado más de 500 centros educativos como puntos de conexión para los estudiantes que no cuentan con acceso a internet o con dispositivos móviles. El Instituto Nacional José Damián Villacorta, en Santa Tecla, fue uno de estos.
Ahí asistió Carlos Josué Díaz, un estudiante que no cuenta con dispositivos electrónicos en casa. Según contó, él trabajaba en una comercial para costear gastos de transporte y alimentación. Sin embargo, perdió su trabajo, pero su hermano lo ayudó económicamente a concluir el año escolar.
«Saber que hay familiares que me apoyan fue una motivación para hacer la prueba. Muchas veces pensé que me iba retirar por la falta de conexión y la falta de recursos, pero quiero demostrarme de lo que soy capaz y quiero concluir AVANZO con éxito», comentó Díaz.
APLICACIÓN EN OCCIDENTE
En Ahuachapán, el centro escolar Alejandro De Humboldt recibió a 70 estudiantes con problemas de conectividad en sus hogares. La directora departamental de Ahuachapán, Sandra Ramírez, dijo que la flexibilidad de la prueba ha permitido solucionar inconvenientes con la conexión.
«Hay una logística funcionando para que todos los estudiantes tengan acceso a la prueba que se desarrolla de manera virtual. Esa es una ventaja, porque así el estudiante se va acoplando a los nuevos entornos digitales», comentó Ramírez.
