El once es el número de oro de la Eurocopa: del 11 de junio al 11 de julio, en once ciudades sede y once jugadores contra once, la Eurocopa de fútbol pone en juego la prestigiosa corona continental que actualmente posee Portugal y a la que aspiran varios pretendientes. Los 8 kilos y 60 centímetros de plata del famoso trofeo Henri Delaunay esperan destino al término del torneo que comienza al medio día de hoy y que llevará a las 24 selecciones clasificadas de Londres a Bakú y de Copenhague a Sevilla. Desde el partido inaugural, un interesante Turquía-Italia de hoy en Roma, todo el continente se dispondrá a ver a los mejores equipos, pese a las continuas dudas por la pandemia del COVID-19, que ya provocó el retraso de un año de la competición, prevista inicialmente en 2020.
Portugal, defensora del título desde hace cinco años [una duración sin precedentes], aborda la gran cita continental con su estrella, Cristiano Ronaldo (36 años), la misma ambición y una mezcla de juventud y veteranía. Ronaldo busca nuevos récords. El cinco veces ganador del Balón de Oro, empatado a 9 goles en la Eurocopa con el francés Michel Platini, puede convertirse en el máximo goleador de la historia de la competición. Además, se puede alzar como el máximo anotador de la historia de las selecciones (104 dianas, a cinco de las 109 del iraní Ali Daei).
Pero en un grupo F de altos vuelos, los portugueses se cruzarán con Francia, subcampeona de Europa hace cinco años y campeona del mundo en 2018, en una revancha de la final de 2016 (1-0). La selección francesa, comandada por sus estrellas Kylian Mbappé, Antoine Griezmann y el retornado Karim Benzema, espera repetir el doblete Mundial-Eurocopa de 1998 y 2000, en el que Didier Deschamps fue capitán. El experimentado entrenador francés se cruzará el martes en el camino de otro campeón del mundo, el alemán Joachim Löw, que vivirá su último torneo y espera terminar por todo lo alto su largo periplo como seleccionador.
Selecciones rejuvenecidas
Otra nación renacida, Italia vuelve a la élite después del drama de quedarse fuera del último Mundial, en 2018. Rejuvenecida por Roberto Mancini, la nazionale lleva 27 duelos sin perder y partirá como favorita de una llave A bastante abierta con Turquía, Gales y Suiza. España, presente en el grupo E con Suecia, Polonia y Eslovaquia, podía aspirar también a una condición de valor en alza con la reconstrucción del seleccionador Luis Enrique, que ha hecho tabla rasa del histórico triplete Eurocopa-Mundial-Eurocopa logrado entre 2008 y 2012.
Si hablamos de juventud hay que mirar a la Inglaterra de Marcus Rashford y Harry Kane, que sueña con la final de Londres, en el mítico estadio de Wembley. Y también está Bélgica con su generación dorada (Eden Hazard, Kevin de Bruyne, Romelu Lukaku), que mira de reojo la Eurocopa para no desperdiciar una nueva ocasión de desempolvar su vitrina de trofeos.