Luego de tres días de búsqueda, las autoridades localizaron y capturaron a un expolicía identificado como Juan Pablo Zometa Gutiérrez, quien provocó lesiones graves a un joven repartidor de pupusas en el cantón Primavera, Santa Ana.
La Policía informó que Zometa «será procesado por el intento de homicidio y castigado con todo el peso de la ley».
La Policía Nacional Civil explicó que el detenido contaba con antecedentes delincuenciales por intento de homicidio en el año 2010, y en el año 2017 por los delitos de portación ilegal de arma de fuego, lesiones y expresión de violencia contra las mujeres.
«Sin embargo, el sistema de justicia lo liberó en ese momento y ordenaba reinstalarlo dentro de la institución, hasta que entró en vigencia de una ley impulsada por el Gobierno actual, en el 2022, con la que fue depurado», informaron las autoridades.
El hecho de la reciente agresión fue denunciado en redes sociales, ocurrió el 5 de noviembre en el cantón Primavera, en Santa Ana, alrededor de las 7 de la noche.
Según un comunicado difundido por la familia de la víctima, el incidente lamentable fue protagonizado por Pablo Zometa, quien «en estado de ebriedad sometió al joven Douglas Cardona, que en ese momento se encontraba trabajando como repartidor de pupusas del negocio familiar».
Según la denuncia, el expolicía, de manera prepotente y con pistola en mano, le arrebató el casco al joven que estaba realizando una entrega de pupusas y comenzó a darle golpes en la cabeza con el mismo casco y amenazándolo con el arma de fuego diciéndole que le quitaría la vida, hasta dejarlo inconsciente.
«El joven fue ingresado al Hospital San Juan de Dios y fue diagnosticado con fractura interna de tabique nasal y dos fracturas de cuello. quedando en estado parapléjico […]. Exigimos justicia y no dejar en la impunidad este caso y demostrar que el peso de la ley caerá sea quien sea», exigió la familia del joven.
Tras difundido el caso, autoridades pusieron en marcha la búsqueda del agresor. El director de la Policía, Mauricio Arriaza Chicas también señaló que «El Salvador dejó de ser el país donde cada quien actuaba a su antojo. Esos tiempos de personas que perdían el control, sin tener consecuencias, son cosa del pasado», aseguró.