Desde hace años la ortodoncia dejó de ser algo exclusivamente un tema para niños y, actualmente, tampoco es algo que se ocupe con fines estéticos; además, el uso de bracket, que antes era motivo de vergüenza, ha quedado en el pasado.
Con el paso de los años la ortodoncia ha avanzado de manera acelerada. Hoy, se encuentran diversas opciones para utilizar este tratamiento de la forma que el paciente lo prefiera y según la necesidad que tenga, porque lejos ha quedado el mito de que el uso de este aparato esté únicamente relacionado con tener una sonrisa con dientes alineados.
Según la odontóloga Mariel Zúniga «los brackets están asociados al tratamiento de ortodoncia, que es un tratamiento que nace con la idea de poder alinear y posicionar de manera correcta los dientes que desde edad temprana se pueden ver en mal posición por falta de espacio, porque hay maxilares muy pequeños o, incluso, por ausencia o presencia de una o más piezas dentales», explica.
Detalla que no hay una edad específica para utilizar este tipo de aparatos, pero lo ideal es que los padres lleven a sus hijos pequeños al especialista para que haga una evaluación desde la erupción de sus dientes.
«El factor por el cual, nosotros, vamos a recomendar la ortodoncia es importante. Si es porque el maxilar es muy pequeño, comienza a tratarse con algo que se llama ortodoncia interceptiva y esa se puede aplicar desde los siete años que ya comienza la aparición de los dientes permanentes. O se pueden colocar en la adolescencia, cuando ya los dientes han terminado o están terminando de erupcionar para comenzar a corregir la posición en la que van surgiendo», agrega.
Zúniga explica que, si bien después de la evaluación se recomienda el uso de bracket, no todas las personas están aptas para utilizarlos porque si hay problemas periodontales (problema de encía, hueso y todo lo que tiene que ver con el soporte óseo) este tratamiento está contraindicado, ya que lejos de mejorar la apariencia de los dientes, puede contribuir a su pérdida.
La evaluación realizada por un especialista, de igual manera, es esencial al momento de definir el tiempo durante el cual se utilizará los brackets.
«También se tiene que ver la parte de la evolución del tratamiento. Hay pacientes que los dientitos van cediendo más rápido. Aproximadamente, el tratamiento anda entre 18 y 24 meses, pero esto va a depender de la puntualidad, los controles del tratamiento, que no estén se despegando brackets y biológicamente que el huesito también está cediendo a este tipo de fuerzas», señala la odontóloga.
Para conocer más sobre la ortodoncia o si desea realizar a su hijo u otro familiar algún proceso odontológico puede visitar Zúniga Dental Care. Para concertar cita puede escribir al WhatsApp 6070-6170 o a través de sus redes sociales.
¿Qué corrigen los brackets?
Según la odontóloga Mariel Zúniga, en algunos el paciente posee los dientes parejos o bien alineados, pero se debe observar o descartar otro tipo de alteraciones como el desgaste de dientes, la sensibilidad o si la mordida es de manera correcta. Caso contrario, puede generar otros problemas como asimetría facial, dolor articular, dolores de cabeza y cuello, bruxismo, entre otros.
QUÉ ALIMENTOS EVITAR
Comer de una manera balanceada siempre es necesario, independientemente si usas brackets o no; sin embargo, durante el tratamiento es importante evitar ciertos alimentos que pueden generar caries o dañar el aparato, estos son algunos:
Dulces o pegajosos: reduce o elimina alimentos que sean azucarados o ricos en almidón porque pueden quedar pegados entre los dientes y el bracket y generar caries o enfermedades periodontales. Además, pueden causar daños en los alambres y hacer que se suelte el aparato.
Alimentos crujientes o duros: palomitas de maíz, pan tostado, nueces y caramelos duros pueden romper tus brackets o hacer que se despeguen.
Frutas o verduras enteras: si deseas comer manzanas o elote es mejor que partas en pedazos pequeños o desgranes para así evitas dañar el equipo al morder la fruta o verdura completa.
Carnes con hueso: si deseas comer alitas o costillas es aconsejable separar la carne del hueso y cortarla en pedazos pequeños, de esta manera se evita que la carne quede incrustada en el diente o en el bracket.