La vida está llena de cambios. Solo los que se adaptan más rápido a los cambios pueden sacar provecho de las nuevas circunstancias. De ese modo, un líder está pendiente de las tendencias en otras latitudes y de los peligros que se empiezan a gestar y que podrían golpear al país. Fue así como El Salvador pudo hacerle frente a la crisis sanitaria, retrasar la llegada del coronavirus y preparar las condiciones tanto en la red de hospitales públicos (que se recuperó de las pésimas condiciones en las que estaba y que, incluso, se amplió) como en los procesos de manejo de pacientes y las negociaciones para conseguir vacunas, a pesar de que las investigaciones apenas comenzaban.
El Gobierno del presidente Nayib Bukele ha sabido enfrentar la pandemia, atender a los enfermos, recuperar a decenas de miles de ellos y, además, obtener suficientes vacunas para inmunizar a la población. El país es un ejemplo para Centroamérica e incluso para el resto del continente. La cadena de noticias CNN en Español destacó los excelentes números en El Salvador, poniendo al país con el 51.53 % de la población vacunada contra el coronavirus, por encima de otras naciones como México, Colombia, Paraguay y Perú. El Ministerio de Salud ha informado que 3.3 millones personas han recibido una dosis y 2.2 millones tienen el esquema completo.
Esto sucede gracias a la previsión y a estar preparado para los retos, adelantándose a las futuras necesidades. Eso mismo sucederá con el bitcóin, que empezará a ser una moneda de curso legal en el país desde el 7 de septiembre.
Al igual que con la preparación contra la pandemia, la oposición ahora se dedica a atacar los planes de adopción de la criptomoneda, cuando, en la práctica, es un ejemplo más de innovación. Ahora que El Salvador es el único país con el bitcóin como moneda de curso legal surgen nuevas oportunidades de negocios y de atracción de inversiones que se pueden aprovechar.
En todo caso, al igual que con el proceso de vacunación, el bitcóin es voluntario. Los que estén en contra tendrán el derecho a quedar al margen de las nuevas oportunidades y recursos disponibles y podrán seguir utilizando los dólares como hasta ahora.
Para el resto, el Gobierno ha desplegado una serie de cajeros electrónicos para dispensar billetes en caso de que los interesados busquen convertir sus bitcoines en dólares, operación que no generará comisiones.
El futuro nos alcanzó. Debemos estar listos para aprovecharlo al máximo.