La confianza de los consumidores estadounidenses se degradó en agosto luego de alcanzar en julio un máximo en dos años, debido a nuevas inquietudes por alzas de precios, en particular de la gasolina y productos de consumo diario.
El índice de confianza cayó a 106,1 puntos según el instituto Conference Board. El dato de julio fue revisado ligeramente a la baja, a 114 puntos frente a 117 anunciados inicialmente.
Para julio, los analistas esperaban 116 puntos según el consenso reunido por Market Watch.
Los consumidores están «nuevamente preocupados por el alza de precios en general, pero en particular de los alimentos y la gasolina», explicó Dana Peterson, economista jefe del Conference Board.
Otro índice que mide la confianza de los consumidores, publicado el viernes por la Universidad de Michigan, dio cuenta de un descenso de la confianza en la economía.